Nápoli, que venía de empatar 1-1 ante Salernitana y dejar pasar dos oportunidades muy claras, sacó el fuego sagrado de un equipo que demostró durante toda la temporada ser el mejor y tras el empate 1-1 ante Udinese se consagró campeón luego de 33 años y desató la locura los de los hinchas.
El partido, que estaba listo para ser una fiesta más allá de ser visitantes, comenzó de la peor manera: Sandi Lovric abrió el marcador en el primer tiempo con un golazo, pero luego Victor Osimhen hizo estallar a los hinchas que estaban en la cancha de Udinese y a las 60.000 personas que colmaron el estadio Diego Maradona y que vieron los 90 minutos con pantallas gigantes.
Luego de 33 años de espera (el último fue en 1990, justamente con Diego Maradona), Napoli logró el tercer título de Serie A de su historia. El equipo conducido Luciano Spalletti se consagró a cinco fechas del final luego de una tremenda temporada y dejó atrás todos los fantasmas.