La viruela símica, también conocida como Mpox o viruela del mono, ganó atención recientemente debido a un aumento en los casos en varios países africanos. Sin embargo, en la otra punta del mundo, Argentina no quedó exenta. Los contagios se situaron en la provincia de Buenos Aires, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Corrientes, Santa Fe y Río Negro.
Este año, la enfermedad afectó a más de 16.000 personas y causado más de 500 muertes en África, lo que llevó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a declarar una "emergencia de salud pública de importancia internacional".
En la Argentina, el Ministerio de Salud reportó 8 casos de Mpox en 2024, con una mediana de edad de 34 años y una distribución geográfica que incluye Buenos Aires, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Corrientes, Santa Fe y Río Negro. Cuatro de estos casos tienen antecedentes de viaje, mientras que los otros están en investigación.
La OMS ha identificado dos tipos principales del virus: el clado I y el clado II, siendo el clado I más grave. Sin embargo, una nueva variante del clado I, llamada clado Ib, ha surgido en la República Democrática del Congo, provocando un aumento significativo en los casos.
Aunque esta variante aún no fue detectada en América, la alerta epidemiológica insta a los países a fortalecer la vigilancia y la prevención.
En el último informe, se observó que los casos en los primeros seis meses de 2024 igualan el total del año anterior, con un alto porcentaje de casos y muertes en niños menores de 15 años, especialmente menores de cinco.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) también ha solicitado una mayor vigilancia y preparación ante la posible introducción de nuevas variantes en las Américas.