En el regreso del público a la cancha, el astro argentino metió un triplete para el tres a cero de local, con el que el conjunto de Lionel Scaloni continúa invicto y como escolta de Brasil.
Se vivió una jornada única en el Monumental de Núñez, en lo que fue el regreso del público a la cancha desde el inicio de la pandemia, gracias a un Lionel Messi brillante, que se conmovió con el Himno, marcó tres goles y se emocionó después de la goleada tres a cero ante Bolivia por las Eliminatorias Sudamericanas.
El primer juego de local después de aquella gloriosa consagración en el Maracaná, el equipo de Lionel Scaloni recibió el aliento de los más de 21 mil hinchas que lograron ingresar a la cancha, y el cariño replicó en el campo de juego, superando a un flojo conjunto visitante casi de principio a fin.
Las ausencias de los futbolistas que juegan en Inglaterra no se sintieron, y al ritmo de un Messi enchufadísimo, Argentina se adueñó de la pelota casi por completo. Y cuando la perdía, a través de una férrea presión, la recuperaba en cuestión de segundos.
Y enseguida, el mejor jugador del mundo frotó la lámpara, y abrió la cuenta con un golazo: caño y pie abierto desde afuera del área, para vencer a Carlos Lampe y poner el uno a cero.
El equipo nacional pareció apagarse por algunos minutos, aunque cuando se encendió, armó un jugadón que terminó en el gol de Lautaro Martínez, pero que fue anulado por un fino offside. El ex Racing tuvo una clarísima en el cierre de la etapa inicial, que desaprovechó de forma insólita.
En el complemento volvió a aparecer el 10. Al partido le faltaban goles de la Selección, y el astro respondió con otro golazo, que incluyó una linda jugada colectiva y una pared en el área con Lautaro, para la definición de derecha, para superar a Pelé como el máximo goleador de una selección sudamericana.
Faltaba más de Messi. Gritó un anulado por offside, y después de una otra buena maniobra grupal y un rebote, puso el tres a cero definitivo, para cerrar la noche bien arriba y "llevarse la pelota". En el medio, Scaloni movió el banco, y entre los Correas y Nico González, podrían haber anotado algún gol más.
Llegó el pitazo final, pero eso no fue todo. Quedaba tiempo para verlo a Lionel Messi llorando de emoción como nunca; el festejo, Copa América en mano, de todo el plantel, y el show musical para terminar de coronar una hermosa noche de Selección y de Eliminatorias Sudamericanas.
Mientras tanto, Argentina continúa invicta en las Eliminatorias rumbo a Qatar 2022, y en segunda posición, por detrás del líder perfecto Brasil.