Desde la Red Federal de Afectados (RFA), manifestaron a AIM la necesidad de un aumento en el número de ingresos a la Carrera del Investigador Científico (CIC) del Conicet. “Que el atraso administrativo no se interprete como retroceso político”, dijeron.
Los investigadores de la RFA “exigimos un aumento en la cantidad de ingresos a la CIC en la convocatoria 2020 que compense el retraso en el lanzamiento de la convocatoria 2021. Entendemos que, de mantenerse fija la cantidad de cargos que el directorio del Conicet había comprometido para un proceso evaluativo previsto de ocho meses (julio 2020 – marzo 2021) para uno que ya lleva catorce (julio 2020 – septiembre 2021) estaríamos frente a una situación de ajuste”, expresaron a este Medio.
Desde el año 2015, en el cual ingresaron a la carrera 914 investigadores e investigadoras, “hemos venido sufriendo una caída sostenida en el número de ingresos (acompaña tabla). Vale decir que el recorte no se ha dado sólo en los números de ingresos destinados a cada convocatoria, sino también en el alargamiento de los plazos entre una convocatoria y otra. Es decir, si para la convocatoria 2020 se proyectaba una cantidad total anual aproximada de 800 cargos, esta cantidad se reduce a la mitad (400) al considerar que, por los retrasos burocráticos, administrativos y de las comisiones evaluadoras, la convocatoria se ha convertido en bianual”.
En ese sentido, “consideramos que este efecto de los retrasos administrativos, que creemos no deseado, podría ser salvado si se duplicara, por lo menos, la cantidad de cargos destinados a la convocatoria (esto es, 1600 cargos). Una cantidad inferior constituiría un recorte en relación con los números comprometidos por el organismo. Si bien este aumento no alcanzaría para compensar las restricciones acumuladas en años anteriores, serviría para mantener al menos un piso en la cantidad de ingresos y contribuiría a reducir el efecto de “cuello de botella” en las convocatorias de ingreso que venimos experimentando desde hace varios años, restando presión sobre la próxima convocatoria”.
Sobre las reducciones experimentadas en las últimas convocatorias cabe decir que han provocado un aumento en la cantidad de veces que le investigador promedio debe presentarse para tener éxito. “Esto ha llevado a que muchas y muchos compañeros y compañeras queden afuera del sistema, sin percibir haberes por sus tareas investigativas, lo cual coarta un número cada vez mayor de carreras en su momento de máximo florecimiento y productividad”.
“Es por ello que exigimos también al directorio del Conicet una mayor previsibilidad en los plazos y criterios de evaluación. El ingreso a la Carrera es el punto definitorio de un proceso de formación y producción muy exigente de (como mínimo) ocho años de duración. En él se ponen en juego no sólo el desarrollo profesional individual de les postulantes, sino el futuro de la inversión que el estado argentino ha realizado a través de elles. Sólo pedimos la oportunidad de trabajar en condiciones dignas y de seguir contribuyendo al crecimiento de nuestro país”, subrayaron.