Un asteroide, llamado Dydomos (“mellizo” en griego), tiene previsto pasar a unos 11 millones de kilómetros de la Tierra en octubre de 2022 y en 2024, según publicó la BBC.
Para lograr desviar su órbita y evitar que se acerque, la Nasa lanzará por primera vez un proyecto para impactar un cuerpo de este tipo.
En 2022, se implementará Dart (Prueba de Redireccionamiento del Asteroide Doble) y una nave impactará contra el Dydomos B, la parte más pequeña del asteroide para probar la viabilidad de desviación del cuerpo.
Este objeto está compuesto por dos cuerpos: el primero que mide 780 metros de ancho y fue denominado Dydomos A y el segundo que mide 160 metros y se llama Dydomos B.
El choque tiene que ser lo suficientemente fuerte para lograr sacarlo de órbita pero sin que llegue a destruirlo y transformarlo en una lluvia de piedras.
"Este no es el primer impacto de una nave espacial en un cuerpo planetario", aclara Patrick Michel, Director de Investigación del Observatorio de la Costa Azul de Francia.
Después del impacto, la misión Hera de la Agencia Espacial Europea (ESA) estudiará el asteroide Dydimos en 2026 para recopilar información clave.
"Esto nos dará una buena estimación de la transferencia de impulso del impacto, y por lo tanto su eficiencia como técnica de desviación", explica el científico del proyecto Hera, Michael Küppers. "Estos son parámetros fundamentales para permitir la validación de los modelos de impacto numérico necesarios para diseñar futuras misiones de desviación”.
"Comprenderemos mejor si esta técnica se puede usar incluso para asteroides más grandes, lo que nos dará la certeza de que podríamos proteger nuestro planeta de origen si es necesario".
Didymos B es muy importante para tales pruebas, ya que se encuentra en la clase más peligrosa de asteroides cercanos a la Tierra debido a su tamaño: los cuerpos más grandes se pueden rastrear más fácilmente, los cuerpos más pequeños se queman o hacen daño limitado, mientras que un impactador del tamaño del binario Didymos.