Información recopilada alrededor de la línea costera del país determinó que algunas áreas se están hundiendo tres o cuatro milímetros por año, acelerando una amenaza largamente esperada, según datos publicados el lunes 2 de mayo. El nivel del mar sube dos veces más rápido que lo previsto en partes de Nueva Zelanda, lo que pone en riesgo a sus dos mayores ciudades, advierte un monitoreo.
Las proyecciones, calificadas por un experto como "un poco aterradoras", son el resultado de un amplio programa de investigación de cinco años con financiamiento del Gobierno, denominado NZ SeaRise, que combina el trabajo de decenas de científicos locales e internacionales.
El codirector de NZ SeaRise, Tim Naish, señaló que se espera que el nivel marino suba medio metro para el año 2100, pero en gran parte de Nueva Zelanda podría ser más cerca de un metro porque al mismo tiempo la tierra se hunde, lo que amenaza a la capital Wellington y a Auckland, la ciudad más grande del país.
Fuente: Agencia DW