El primer jueves de noviembre de cada año se celebra el Día Internacional contra la Violencia y el Acoso Escolar, incluido el Ciberacoso, constató AIM. Con esto, se busca acabar de una vez por todas con un tipo de violencia, que afecta a la población infantil a nivel mundial y que provoca terribles secuelas psicológicas.
¿Qué se entiende por acoso escolar?
El acoso escolar o también conocido como bullying es un hostigamiento permanente de una o más personas hacia un estudiante, donde por lo general se producen agresiones verbales y físicas y sin haber una causa aparente para que ocurran semejantes hechos.
Lamentablemente, el maltrato escolar ha venido en aumento en los últimos años, y muchos niños y jóvenes son víctimas de estas situaciones y que sí no son detectadas a tiempo, pueden tener consecuencias muy lamentables, que inclusive pueden poner en riesgo sus vidas.
Acoso escolar y ciberacoso, las dos caras de una misma moneda
Testimonio de Jasmine, una víctima de acoso escolar
Aunque parecieran dos términos diferentes el acoso escolar y el ciberacoso están estrechamente relacionados. Lo que realmente los diferencia es que el primero se hace de manera directa en las escuelas y centros de aprendizaje, mientras que el ciberacoso ocurre a través de un ordenador, el móvil y otros medios tecnológicos.
Ya es una realidad innegable y abrumadora, que miles de niños y adolescentes sufren a diario de maltrato psicológico y físico por parte de sus propios compañeros, pero que tienen otros alcances como Internet y los sitios web y que pueden causar daños irreparables tanto al niño, como a todo su núcleo familiar y social.
Algunas estrategias para ayudar a los niños y jóvenes contra el acoso escolar
Aunque resulta difícil luchar contra un mal que aqueja a la población mundial como es el acoso escolar y el llamado ciberacoso, hoy más que nunca, resulta imperioso brindarles a nuestros niños y jóvenes herramientas para la vida, las cuales le permitan defenderse ante situaciones que a los padres, familiares y maestros se les escapa de las manos.
En este sentido, una vez que el niño inicia la etapa escolar, es tarea de los progenitores y también de los educadores, fortalecer su personalidad y para ello se necesita una educación en valores como la autoestima, la voluntad, la sinceridad, la empatía y la amistad.
Por lo general, los niños y jóvenes que sufren violencia en sus hogares, modelan esos mismos comportamientos una vez que comienzan a sociabilizar. También existen agentes externos como la televisión, internet o el cine, que transmiten mensajes negativos y que contribuyen a reforzar conductas inapropiadas, que terminan por socavar la mente de los más vulnerables, en este caso, la población infantil.
La lucha contra la violencia y el acoso escolar es tarea de todos
Si como sociedad, buscamos acabar de una vez por todas con la violencia, el acoso escolar y el ciberacoso, entonces es la hora de tomar cartas en el asunto, ya que es alarmante como cada día miles de niños y jóvenes en todo el mundo tienen que pasar por esta triste experiencia, que sin lugar a dudas afecta de forma emocional, física y mental sus vidas.
De acuerdo al informe redactado por la Unesco, uno de cada tres estudiantes es víctima de acoso escolar por parte de sus compañeros en los centros donde se imparte educación, sin dejar de lado, las alarmantes cifras del ciberacoso, con consecuencias realmente desbastadoras.
En este sentido, es necesario aunar esfuerzos de todos los sectores involucrados, incluyendo gobiernos, organismos internacionales, profesionales en el área educativa, sociedad de padres y a la comunidad en general para garantizar una educación de calidad, que dignifique al ser humano, que sea inclusiva y donde se respeten los derechos de las personas.