El diputado brasileño Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente, defendió el desarrollo de una bomba nuclear en su país y consideró que así sería más respetado.
Bolsonaro hijo destacó la importancia de desarrollar armas nucleares y aseguró que si su país tuviese un “poder bélico mayor”, sería más respetado a nivel internacional, así lo informó la prensa brasileña este miércoles.
El diputado hizo esas declaraciones en una exposición ante alumnos de la Escuela Superior de Guerra, en el Congreso de Brasil y argumentó: “es como dice el presidente (Donald) Trump: ‘Un gran gobierno comienza con grandes Fuerzas Armadas’. Si contásemos con los cazas Gripen, el Prosub (Programa de Desarrollo de Submarinos) ya finalizado, con submarinos nucleares que tienen autonomía mucho mayor, si tuviésemos un poder bélico mayor, tal vez seríamos tomados más en serio por (Nicolás) Maduro y temidos, quién sabe, por Rusia y China”.
“Soy partidario de esa visión, poco me importa si dicen que soy agresivo o que quiero incendiar el mundo, pero por qué todo el mundo respeta a EE.UU.”, cuestionó y dijo que es porque “es el único país que tiene condiciones para abrir dos frentes militares, dos guerras en cualquier lugar del mundo”.
“El terrorista, el criminal, el dictador sanguinario, solo respeta una cosa: la fuerza”, aseguró.
“Garantizan la paz”
Según Eduardo Bolsonaro, las armas nucleares son, por ejemplo, las que “garantizan la paz en Pakistán”. “¿Cómo sería la relación entre Pakistán e India si solo uno de los dos tuviese bombas nucleares? ¿Sería de la misma manera que hoy? Claro que no”, dijo.
Durante la presidencia de Fernando Enrique Cardoso (1995-2003), Brasil firmó el Tratado de No Proliferación Nuclear y un posible incumplimiento implicaría una serie de sanciones para el gigante sudamericano.
El diputado brasileño tiene presente eso y dijo que “es un tema muy complicado, pero creo que un día puede volver a ser debatido” en el Congreso, al tiempo que reconoció que lo tildarán de “agresivo”.
En ese sentido reconoció que lo “políticamente correcto” es no hablar de ciertas cosas. “Tengo que decir que todo está bien, que nunca entraremos en guerra, que pueden quedarse tranquilos.
Es una ironía, porque del otro lado de la frontera hay un loco asociado con terroristas y el narcotráfico. Sabemos que en cualquier momento, si eso evoluciona hacia un escenario peor, cosa que nadie desea, quienes van a entrar en acción son los señores (los militares)”, concluyó.