El alcalde de Londres extendió la primera advertencia de calidad del aire desde agosto de 2020 por un día más después de que los niveles de contaminación se dispararan a lo largo de la semana.
Una mezcla de alta presión atmosférica, poco viento y emisiones de la temporada alta de agricultura hizo que la calidad del aire de Londres fuera peor que la de Pekín el viernes. Si bien la contaminación normalmente llega a Londres desde el centro y el sur de Europa en esta época del año, actualmente falta viento para eliminar emisiones de la ciudad, según Andrew Grieve, analista sénior de calidad del aire en el Grupo de Investigación Ambiental del Imperial College London.
“Para cuando (llegamos) al viernes, tuvimos esencialmente cinco días de acumulación gradual de contaminación”, dijo.
La primavera del hemisferio norte también es cuando los agricultores de todo el Reino Unido y el continente esparcen fertilizantes, lo que empeora aún más la calidad del aire.
La alerta, que inicialmente iba de martes a jueves, se renovó después de que el Imperial College London pronosticara que los niveles de contaminación se mantendrían altos el viernes, dijo la oficina del alcalde Sadiq Khan en un comunicado.
El Gobierno instó a los londinenses a no conducir sus automóviles y abstenerse de quemar madera o desechos de jardín. También aconsejó a las personas con problemas cardíacos y pulmonares que eviten el ejercicio físico.
Más vientos provenientes del Mar del Norte durante el fin de semana deberían comenzar a despejar el aire, mientras que se espera que el área de alta presión regrese a Europa continental, según Richard Miles, portavoz del Servicio Meteorológico Nacional.
Grieve dijo que el sábado comenzará contaminado y luego mejorará gradualmente a lo largo del día. “El domingo debería ser mucho mejor”, dijo.
Los países del continente europeo también están luchando contra el smog. En Bélgica, el Gobierno impuso un límite de velocidad temporal de 90 kilómetros por hora en algunas autopistas, mientras que el transporte público en la capital, Bruselas, se hizo gratuito el viernes y el sábado para fomentar un menor uso de automóviles. El país estaba experimentando altas concentraciones de polvo fino que también se debieron en parte a la baja velocidad del viento, según informes de los medios locales.
Al menos una empresa en el distrito Canary Wharf de Londres le dijo a los empleados que no fueran a trabajar hoy si tenían problemas pulmonares o cardíacos, o condiciones tales como el Covid-19 prolongado.
La contaminación de Londres también fue un tema candente en las redes sociales entre los residentes y trabajadores de la ciudad. Algunos usuarios de Twitter dijeron que era posible “saborear” cuán mala era la calidad del aire, mientras que otros publicaron fotos del smog que cubría las vistas de lugares emblemáticos de Londres como Canary Wharf o el Albert Memorial en Kensington Gardens.
La contaminación sigue siendo un grave problema en la capital británica y la mala calidad del aire se asocia con 4.000 muertes prematuras al año, según funcionarios de la ciudad. Una Zona de Emisiones Ultra Bajas, que impone un cargo diario por el uso de vehículos con emisiones de escape más altas, se ampliará el próximo año para cubrir un área de más de 965 kilómetros cuadrados.
Fuente: Bloomberg