La nueva boca que se abrió hace diez días a 300 metros del cono principal del volcán de La Palma y que hasta el sábado solo había emitido gases, cenizas y piroclastos, ha comenzado a emitir lava y ha formado una nueva colada que discurre por una nueva zona, al sureste de la isla, publicó el diario español La Vanguardia.

Con estas son ya once las coladas que ha generado el volcán y que discurren ladera abajo, si bien, dado que la ocho y la diez se unieron en una al entrar en el barrio de La Laguna, esta nueva lengua es considerada la diez. La nueva colada avanza por la zona de Las Manchas a unos 50 metros por hora, según el cálculo que realiza el Instituto Geográfico y Minero de España (IGME), mientras que la sismicidad continúa en aumento.

La colada, según indicó ayer el director técnico del Plan de Prevención del Riesgo Volcánico (Pevolca), Miguel Ángel Morcuende, se dirige hacia el núcleo del Corazoncillo, que se sitúa antes al barrio de San Nicolás, en Las Manchas.

Esta zona está evacuada desde el inicio de la erupción pero cuenta con numerosas viviendas además del cementerio de Las Manchas. Morcuende destacó ayer que esta colada se está viendo frenada por la gran densidad de ceniza que encuentra a su paso y que “va deglutiendo” aumentando su viscosidad.

Además tiende a unirse a la colada primigenia (la que formó la fajana en el mar). “Esta es una buena noticia. Si se frena y se une a la primera es probable que no haga tanto daño”, dijo. La colada de La Laguna sigue parada aunque puede moverse en cualquier momento dado que recibe aporte de lava.

Fuente: La Vanguardia, España.
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