Esta jueves se conoció que la Municipalidad de Paraná establece el horario de comercio de 9 a 20 horas en esta nueva etapa de distanciamiento social. Fue luego de cuestión decisión tirante entre el Sindicato de Comercio que plantea una continuidad del horario corrido implementado con la Cuarentena y el desdoblamiento que impulsa la Cámara de Comerciantes de la Peatonal. Desde la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) Paraná, su tesorero Manuel Gabás dijo a AIM que no puede haber oposición al horario discontinuo cuando al comercio no le cierran los números.

Luego de la reunión llevada a cabo en Casa de la Costa entre la Cámara de Comercio y el Centro de comerciantes de Peatonal y el Sindicato de Empleados de Comercio, la Municipalidad de Paraná definió el horario de atención al público de la actividad comercial y de los centros comerciales, galerías y paseos de compras en horario corrido de 9 a 20 horas. Fue luego de una disputa entre sindicatos y comerciantes del centro por dar continuidad al horario de corrido o no implementado con la apertura de la cuarentena programada. Si bien el horario de corrido puede ser bueno en ciertos aspectos, el dirigente de Apyme, Manuel Gabás, que posee su negocio en el micro centro, reconoce que “en Paraná no existe la conciencia, la costumbre, para comprar en horario corrido, y más en el verano, que por sí son meses malos”, planteó a esta Agencia.

Por otra parte, el referente de los pequeños comerciantes admitió que una medida de horario discontinuo afectaría la circulación, y con ello las posibilidades de contagio de Covid-19. Este dilema es algo “no resuelto”.

De todos modos, Gabás señalo la dura realidad de los negocios del microcentro, donde la actividad del sector “ha caído entre el 40 y 50 por ciento en las ventas en locales que en la mayoría son chicos en superficie. Y hay un 15 por ciento de desocupados. Es una situación crítica”, afirmó.

“Como Apyme, no nos podemos oponer al horario discontinuo, por más que hay un conflicto con el gremio que lo apoya. Pero si se continúa con el horario actual, va a seguir cayendo negocios”, apuntó.

“El negocio del microcentro sufren por la licuación de sueldos y el sector de riesgo no sale a comprar, va al barrio y el turismo tampoco lo alimenta”, describió sobre el panorama para afirmar que “el negocio del centro sufre más que el del barrio”.

Por último, comerciante con años de experiencia en el rubro marroquinería, apuntó a que el sindicato debería “trabajar más sobre la conciencia del consumidor para el horario corrido”, en lugar de lanzar el reclamo sin propuesta, cuando tampoco reconoce que “el comercio minorista cierra los fines de semana y el supermercado abre de lunes a lunes”, observó.

El municipio recordó que todos los locales comerciales deberán seguir el protocolo de prevención acordado para el sector, siguiendo las recomendaciones del Comité de Emergencia Sanitaria (Coes) de la provincia. Entre ellas, higiene y desinfección constante de las superficies, uso de tapa bocas o barbijos, distanciamiento social y disponer en la puerta de acceso general de una persona para control de temperatura y sanitización de clientes, empleados y proveedores.