El dirigente de Patria Grande cruzó al vocero presidencial, que se refirió a los asesinatos en la toma de La Matanza como "un problema local" y chicaneó diciendo que "el Estado no está tan presente en esos lugares" porque "vemos gente matándose por un pedazo de tierra".
El dirigente social Juan Grabois salió al cruce de “la brutalidad” con que el gobierno nacional se pronunció sobre el asesinato de cinco personas en una toma del partido de La Matanza y le recordó que ese tipo de hechos ocurre mientras el Estado nacional promueve la entrega de tierras a capitales extranjeros.
“La necesidad y la urgencia debería ser que haya tierra para los argentinos, no sacar normas para que la tierra argentina se pueda entregar a cualquier multinacional”, lanzó el referente de Patria Grande.
Las declaraciones de Grabois fueron una respuesta a lo dicho por el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien en la conferencia de ayer en Casa de Gobierno declaró que el caso de los asesinatos en la toma de González Catán fue una muestra de que “el Estado no está tan presente en esos lugares”.
“Han hecho tanta publicidad del Estado presente y de repente vemos gente matándose por tener un pedazo de tierra”, chicaneó el portavoz y agregó que ese hecho se trató de un asunto “estrictamente provincial”.
A través de la red social X, Grabois calificó de “oportunistas” a los conceptos del vocero. Además, le respondió que esa “masacre” podría haber sido “por un miserable pedazo de tierra en un terreno totalmente insalubre”, pero aclaró que la cuestión iba más allá.
Esas personas, continuó el fundador del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), “prefieren vivir en esa tierra ensangrentada a la nada”. Y en este sentido criticó el revés que el gobierno de Javier Milei le dio a las políticas de generación de suelo urbano.
“Si como sociedad seguimos empujando a medio pueblo a un basural sin oportunidades, la mierda nos va a salpicar a todos”, advirtió en su escrito.
En la misma línea, le recordó al gobierno nacional que “un lote para cada familia no es tan difícil en un país con un habitante cada diez hectáreas” y lamentó que “ningún gobernante -nacional, provincial, municipal- tome esta cuestión como prioridad”.
Por esta razones indicó que lo ocurrido en La Matanza “no fue un hecho estrictamente provincial” y subrayó que “a cualquier dirigente de cualquier partido” político le “debería avergonzar” el tema.
Grabois también cuestionó la doble vara con que es abordado el tema de la posibilidad de acceso a la tierra. Sostuvo que mientras el gobierno impulsa la venta de grandes expansiones a extranjeros, cada vez que sectores empobrecidos u organizaciones sociales quieren acceder a un lote son discriminados.
Al respecto recordó el proyecto Arcas, que en 2022 había sido impulsado en Mar del Plata y desató una polémica que tergiversó los hechos. “Todo se tiñe de sospecha y xenofobia: ‘el barrio de Grabois’, ‘quieren llenar Mar del Plata de negros de La Matanza’", dijo para recordar los discursos que giraron en torno del asunto.
Por último, el dirigente alertó que “si como sociedad seguimos empujando a medio pueblo a un basural sin oportunidades, la mierda nos va a salpicar a todos”, y aseveró que es “entre todos” la forma en que “deberíamos solucionar el problema”.