Los empleados de bancos públicos y privados realizarán paro este jueves, con asistencia los lugares de trabajo pero sin atención al público. Exigen una recomposición salarial del 60 por ciento. “Será una medida de fuerza contundente”, aseguró a AIM el secretario adjunto de La Bancaria, Augusto Gervasoni.

Es el primer paro después de cinco años que hacen los bancarios luego del fracaso de las negociaciones paritarias con las cuatro cámaras que representan a las patronales y el Banco Central en el Ministerio de Trabajo de la Nación.

La medida de 24 horas “será con asistencia a los lugares de trabajo pero con desconexión, es decir, estaremos en las unidades laborales en estado de asamblea y movilización y no habrá atención al público”, indicó Gervasoni.

En ese sentido, precisó que la medida surgió ya que lo que ofrecen las patronales es considerado insuficiente: “Proponen un 12 por ciento para el primer trimestre (monto que quedó atrás, porque la inflación supera ese porcentaje) y a su vez desde abril ir pagando en cuotas lo que dicte el índice de inflación del Instituto de Estadística y Censo (Indec) hasta llegar a un techo del 45 por ciento”. En contraposición los trabajadores reclaman “un 60 por ciento de aumento desde el 1 de enero, que es un número que no es arbitrario sino que responde a lo que los mismos bancos le plantearon al Banco Central de lo que se estima de inflación para este 2022”, explicó el dirigente sindical, quien precisó: “Es una falta de respeto de la patronal hacer negocios de un 60 por ciento y querer pagar a los trabajadores un 45 por ciento”.

Al respecto, Gervasoni consideró que “los bancos pueden pagar un salario digno a los trabajadores porque en medio de la crisis –como en las épocas de crecimiento- han tenido una rentabilidad extraordinaria, porque gran parte de la situación económica de los ciudadanos pasa por la actividad financiera”.