Desde el colectivo Guardia Feminista de Abogadas Católicas por el Derecho a Decidir expresaron su preocupación por el estado de desnutrición de una niña de 13 años de la comunidad Quom, en el Chaco, que está grave tras dar a luz por cesárea a las 29 semanas de embarazo. “Esta es otra prueba más de la inconsistencia del argumento ‘salvemos las dos vidas’, ya que a la niña no se le permitió acceder a una Educación Sexual Integral (ESI), como garantía de su derecho humano por ser humana, como tampoco a un aborto no punible”, expresó a AIM Fernanda Vázquez Pinasco, abogada  e integrante del de la agrupación, como así también de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, y Alianza Nacional por los Derechos Humanos de las Mujeres.

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La menor, que atraviesa un grave estado de salud, padece desnutrición, anémia y neumonía, mientras que su bebé nació con apenas un kilo. Al respecto Vázquez explicó que  “esa gestación fue producto de una violación” ya que “la niña no sabia que estaba embarazada hasta su arribo a el hospital Perrando” donde ingresó con “una tuberculosis diseminada”.

“Esta es otra prueba más de la inconsistencia del argumento salvemos las dos vidas, ya que a la niña no se le permitió acceder a ESI como garantía de su derecho humano, por ser humana, como tampoco se le permitió acceder a un aborto no punible tanto por la causal violación como la causal salud. Todo ello se traduce en violencia institucional”, enfatizó Vázquez.

La letrada informó a esta Agencia que la compleja situación de la menor se suma a otros 15 casos de chicas que han terminado muertas. En este sentido, la abogada apeló a la responsabilidad del Estado y dijo que las muertes son evitables, a través de “políticas públicas donde las niñas adolescentes y mujeres tengan pleno y libre acceso a una ESI para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir”.

El Comunicado

Los dichos de Vázquez a esta agencia fundamentaron el comunicado enviado a AIM por el colectivo de la Guardia Feminista de Abogadas Católicas por el Derecho a Decidir, que se refirió al caso de la niña Quom: “¿Por qué tenemos una adolescente (...) de 13 años, desnutrida, embarazada de 32 semanas, sin controles prenatales y con un cuadro de neumonía en grave estado? ¿De qué interseccionalidad hablamos si esta niña no tuvo acceso al sistema de salud en términos reales, con información para consentir su embarazo?"

Por otro lado, el texto interpela a los dirigentes políticos para “pensar que un gran sector de nuestras niñas y adolescentes entra en la ciudadanía a través de la maternidad”. Asimismo, recalcó que el Estado debe estar “presente con políticas públicas eficaces que logren promover algo de dignidad en sus vidas, por fuera de mandatos patriarcales de reproducción obligatoria”.

Asimismo, a través del comunicado, el colectivo criticó duramente el “vacío slogan ‘salvemos las dos vidas’, ya que ninguno de quienes levantan estas pancartas estuvo cerca de las necesidades de esta niña”.