El gobernador Gustavo Bordet envió a la Legislatura un proyecto por el que Entre Ríos adherirá acabadamente a la Ley nacional de Regulación de la Publicidad, Promoción y Consumo de los Productos Elaborados con Tabaco, por lo que se prohibirá fumar en  casinos y salas de juegos, en línea con los estándares internacionales en materia de control de tabaco, confirmó AIM. 

En la última sesión de la Cámara de Senadores ingresó en el hemiciclo y fue girado a comisión una iniciativa del Ejecutivo que  adhiere la provincia a las disposiciones  de la Ley Nacional N° 26.687 de “Regulación de la Publicidad, Promoción y Consumo de los Productos Elaborados con Tabaco”, y deroga la Ley Provincial 9862 de control de tabaco.

Actualmente la ley provincial, permite fumar en algunos lugares (casinos, salas de juego, etc) lo que es incompatible con la Ley Nacional, que en línea con los estándares internacionales en materia de control de tabaco, no permite la habilitación de sectores para fumar, aun cuando estén separados estructuralmente o posean sistemas de purificación de aire.

“La legislación es clara en este aspecto y prohíbe fumar en todos los lugares cerrados de acceso público, por lo que sólo se podrá fumar en los espacios al aire libre”, argumentaron desde el Ejecutivo, en los fundamentos del proyecto.

La exposición al humo de tabaco no es una simple molestia sino un grave riesgo para la salud.

El humo de tabaco contiene alrededor de 4800 productos químicos, de entre los cuales más de 200 son considerados cancerígenas. Cuando alguien fuma en un espacio cerrado, el aire se contamina con estas sustancias tóxicas y las personas que se encuentran en dicho espacio se exponen a sus efectos nocivos.

La evidencia científica indica que no hay ningún nivel seguro de exposición al aire contaminado por humo de tabaco, por lo que la única manera eficaz de proteger la salud de toda la población es implementar espacios 100% libres de humo.

Con la adhesión se busca reducir “el consumo de productos elaborados con tabaco; la exposición de las personas a los efectos nocivos del humo de productos elaborados con tabaco; el daño sanitario, social y ambiental originado por el tabaquismo”; y prevenir “la iniciación en el tabaquismo, especialmente en la población de niños y adolescentes”.

También se apuesta a fomentar “la promoción, la educación para la salud, así como la difusión del conocimiento a las generaciones presentes y futuras de los riesgos atribuibles al consumo de productos elaborados con tabaco y por la exposición al humo de tabaco”.