Por Fundación Barbechando, especial para AIM. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, por primera vez, en su nuevo rol, compareció ante la Cámara de Diputados para presentar su informe de gestión, en una sesión que estuvo marcada por el intenso debate y las tensiones dentro y fuera del recinto.

Durante más de cinco horas, Francos detalló las principales políticas implementadas por el gobierno, donde abordó temas clave como la inflación, la situación económica, el sistema previsional y las políticas educativas; pero fue la cuestión tributaria captó gran parte del foco.

Uno de los momentos más relevantes de la sesión fue cuando el diputado Juan Manuel López, del bloque de la Coalición Cívica, planteó inquietudes sobre la política impositiva que afecta al agro. En su intervención, López reclamó mayor claridad respecto a la disminución tributaria, señalando la necesidad de “poner fin a las retenciones”, una demanda histórica del agro.

Ante esto, el jefe de Gabinete respondió refiriéndose a los recientes anuncios del presidente en la Expo Rural vinculados a la reducción de los derechos de exportación para las cadenas de producción vacuna, porcina y láctea.

Según Francos, estas medidas apuntan a aliviar la carga fiscal sobre los sectores productivos, aunque evitó precisar fechas concretas sobre una baja generalizada de los Derechos de Exportación.

“Estamos trabajando en una estructura tributaria más justa y sostenible para acompañar al sector productivo”, afirmó el funcionario, lo que provocó reacciones encontradas entre los presentes.

El informe también fue escenario de fuertes críticas, principalmente por las políticas económicas del gobierno. Sin embargo, el debate se vio interrumpido cuando el bloque de Unión por la Patria decidió abandonar el recinto debido a los disturbios que se registraban en las inmediaciones del Congreso.

La sesión especial dejó en claro que las políticas agropecuarias seguirán siendo tema de debate, particularmente en torno a la reducción de la presión tributaria, un tema que aún no ha encontrado respuestas definitivas y que genera tensiones en el ámbito legislativo.

Con un Congreso dividido y un clima social cada vez más tenso, el informe de Francos deja una serie de interrogantes abiertas sobre el futuro de las políticas agrobioindustriales en un contexto económico complejo.