La Cámara Baja sesionará este miércoles. En la jornada ingresaría dictamen de comisión del proyecto de Presupuesto 2023, según se acordó en Labor Parlamentaria confirmaron a AIM.

Diputados podría dar media sanción al proyecto de Presupuesto que remitió el Poder Ejecutivo si la oposición da el quorúm necesario, adelantaron a esta Agencia fuentes legislativas. Es que la Ley de Leyes fue trabajada en una comisión bicameral y tuvo ya un amplio debate con funcionarios que brindaron explicaciones sobre partidas y proyecciones para el último año de gestión del gobernador Gustavo Bordet.

El texto tuvo dictamen de comisión y se acordó en Labor Parlamentaria incluirlo en los expedientes a tratar en el hemiciclo.

Cabe recordar que el proyecto del Ejecutivo fija en 954.629.753.000 pesos las erogaciones del presupuesto de la administración Provincial para el ejercicio 2023 con destino a los gastos corrientes y de capital; no prevé autorización para endeudamiento; fortalece la obra pública, las partidas en salud, desarrollo social, seguridad, la política salarial y el apoyo a los sectores productivos, con el objetivo de generar más empleos privados.

En su mensaje a la Legislatura, el gobernador Gustavo Bordet destacó que es un presupuesto equilibrado que nuevamente no necesita solicitar a la Legislatura autorización para endeudamiento: “El saldo total de la deuda consolida el decrecimiento que viene experimentado en los últimos años y, en términos absolutos hacia el ejercicio 2023, alcanza un total de 10.900 millones de pesos. Expresado en dólar promedio representa U$S 648 millones. Vale recordar que hacia fines del 2017 dicho valor promediaba los 1.500 millones de dólares. En términos relativos, a fines del 2017 el monto total de la deuda representaba el 62 por ciento del total de los recursos corrientes, el 69 por ciento a fines del 2019 y hacia el 2023 dicha relación se ubica en el orden del 27 por ciento”.

Además, contempla en su apertura un Fondo de Reserva de $ 8.000 millones, ampliables durante el ejercicio, el que podrá ser invertido en el sistema financiero o en el mercado de capitales a fin de resguardar el cumplimiento de los compromisos de la deuda internacional ante eventuales fluctuaciones no previstas en el tipo de cambio.