El Senado de Entre Ríos sancionó este miércoles la ley que crea el Régimen de Promoción y Desarrollo Industrial. Tras obtener media sanción en Diputados, la aprobación definitiva se dio de manera unánime en la 5ta Sesión Ordinaria del 144º Período Legislativo en la Cámara Alta de la provincia, motivo por el cual pasará al Poder Ejecutivo para su promulgación definitiva, supo AIM.

La ley fue aprobada por unanimidad y ya contaba con media sanción de la Cámara Baja provincial. El texto asume el objetivo de promover la "transformación del perfil productivo de la provincia, mediante la promoción de la creación de valor agregado en origen, en un marco de uso sustentable de los recursos naturales" y estimular la "radicación industrial con base en un desarrollo geográfico equilibrado", entre otros propósitos.

La ley llega para reemplazar y actualizar la legislación vigente, que desde 2013 también exime de impuestos provinciales a industrias nuevas o que planifiquen expandirse en la provincia, pero con requisitos que el nuevo proyecto viene a flexibilizar más.

La ley anterior tenía cierta complejidad de implementación por las condiciones que exigía a las empresas en cuanto a ventas, equipamientos, infraestructura, exportación y contratación de personal. La exención que se otorgaba a la industria se determinaba por una fórmula de cálculo y variaba según el cumplimiento de esas condiciones. Así, el acceso a la eximición impositiva variaba desde un 40 por ciento a un 70 por ciento entre una empresa y otra.

La ley que aprobó este miércoles en Senado aplica para establecimientos existentes que incrementen su capacidad operativa instalada como mínimo 15 por ciento y para aquellos "nuevos": los que inicien su producción "en forma parcial o total" a partir de la vigencia de la nueva ley y al que reactive y ponga en marcha uno que haya estado inactivo por un año o más.

Las empresas que deseen las exenciones no deben registrar deudas fiscales, sociales o administrativas con el Estado provincial.

La nueva legislación otorga la exención total durante 10 años para nuevas empresas, que sólo deben cumplir dos de estos cuatro requisitos: incrementar la capacidad de producción sin reducir personal; incrementar planta de personal efectiva; adquisición de bienes de capital sin reducción de personal; e incremento de exportaciones sin reducción de personal.

Las exenciones provinciales incluyen Ingresos Brutos, Inmobiliario, Sellos y Automotor.

La nueva normativa también prevé incentivos "regionales" según el lugar donde se establezcan. Para esto, el Ejecutivo dispondrá cuáles serán "zonas de desarrollo estratégico industrial". Se suman, a su vez, incentivos "sectoriales", para aquellas que presenten proyectos industriales de industria 4.0, implementación de Buenas Prácticas Industriales, sustentabilidad ambiental, gestión de calidad o que el incremento de personal sea de mujeres.

El proyecto sancionado prevé, como novedad, el reintegro del costo de las tarifas eléctricas de un 10 por ciento, 8 por ciento o 4 por ciento, según el tamaño de la empresa, y aquellas que implementen energías renovables pueden sumar un 5 por ciento a ese beneficio.

Finalmente, el gobierno destaca la ventaja para micro y pequeñas empresas (que representan más del 80 por ciento de la industria de la provincia) que pueden acceder a beneficios sin necesidad de que incrementan producción, tanto para firmas existentes o nuevas.

En tanto, los establecimientos industriales nuevos pueden obtener un reintegro de hasta un 50 por ciento de las inversiones que realicen en obras eléctricas y gasíferas.

Cabe destacar que la iniciativa es resultado de un trabajo articulado del equipo de Diputados con la Dirección General de Industria y el equipo técnico de la Unión Industrial de Entre Ríos (Uier). Se trata de un proyecto de ley que busca incorporar empresas a la Promoción Industrial, pero también respaldar a las ya existentes que realizan nuevas inversiones. Para ello, se realizaron diversos aportes para lograr un régimen que impulse el perfil industrial de la provincia.

Desde la Uier, se destacó que la nueva ley contempla exenciones impositivas basadas en los incrementos de las inversiones, la actividad, la producción y el empleo. Además, presenta como novedad la promoción de inversiones en proyectos vinculados a la sustentabilidad e industria 4.0, las buenas prácticas industriales y la gestión de la calidad, todos ellos aspectos estratégicos para las necesidades actuales que demanda la industria.

Otro ítem importante que se plantea sobre la normativa es que será más operativa y simple para las industrias acceder al beneficio. El objetivo es también darle mayor previsibilidad a las micro y pequeñas industrias. Por ello, ante la necesidad de lograr un alcance mayor en cuanto a empresas beneficiarias e impacto directo sobre la industria, también se consideró que resulta clave la adhesión de los municipios.