La medida buscará mejorar la comprensión de los textos. Deberán cumplir con ella maestros y alumnos de todos los años. Este miércoles se hará una "jornada institucional" para fijar esa instrucción. 

Maestros y alumnos de escuelas primarias deberán cumplir a partir de ahora con un ritual diario destinado a tratar de mejorar la comprensión de los textos. Se tratará de 20 minutos de lectura en conjunto.

La lectura diaria será obligatoria en todos los años y todos los colegios primarios. Según sostienen en la DGE, es un medida necesaria para que mejore la comprensión lectora "en forma transversal", es decir, en todas las asignaturas.

El Gobierno Escolar busca así empezar a mejorar un aspecto básico del aprendizaje y cuyo déficit preocupa a las autoridades desde hace mucho tiempo.

Eso sí, la definición y articulación de ésta y otras medidas demandará una jornada institucional en todas las escuelas primarias. O sea, una suspensión del día de clase.

En efecto este miércoles no habrá clases en los niveles inicial y primario de todos los colegios públicos y privados de la provincia.

Además de bajar la instrucción para que en las aulas se lean textos todos los días, se discutirán acciones para mejorar la enseñanza del inglés entre el fin de la primaria y el inicio de la secundaria.

Actualmente, en las escuelas públicas apenas hay dos horas de inglés en séptimo grado, aspecto que marca una diferencia a favor de los colegios privados, donde el idioma inglés tiene mucha mayor presencia.

Otro punto de la jornada institucional será la articulación del plan de alfabetización entre las salas de cinco años y el comienzo de la primaria.

En este sentido, el año pasado se entregaron 30.000 ejemplares del libro "Klofky y sus amigos exploran el mundo", texto que van a continuar usando los chicos en primer grado.

La autora del libro es Ana María Borzone, una investigadora del Conicet. El plan oficial consiste en que, a través de este libro, los niños aprendan a leer y a escribir a los cinco años.

A pesar de la suspensión de clases, la Dirección General de Escuelas aclaró que la jornada institucional de mañana no afectará el calendario oficial, que ha dispuesto para 2018 un total de 186 días de clase.

Jaime Correas, jefe de la DGE, aclaró en este sentido que la jornada en cuestión "estaba prevista y es la única inevitable". El año pasado se hizo en julio y en 2018 se adelantó, aunque el Gobierno Escolar hubiese preferido hacerla incluso antes que ahora.

En cambio, las escuelas secundarias tendrán clases normalmente mañana y Correas dijo que no habrá suspensión de actividades en lo que queda del año.

Los 186 días de clase para 2018 fueron previstos en la resolución 2900 de la DGE, con la idea de superar el mínimo de 180 días fijado en el artículo 1º de la ley 25.864.

Mdzol