El 25 de abril se realizará una caravana contra la planta de pasta de celulosa UPM y para repudiar la contaminación que genera la pastera en la región, confirmó a AIM Javier Pretto, integrante de la Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú (Acag). La proclama se leerá en Arroyo Verde.

En el 2019 se suspendió la marcha al puente General San Martín por el Asilamiento Social Preventivo y Obligatorio (Aspo), por lo que se realizó una jornada virtual.

Este año, ante un escenario sanitario distinto y un panorama geopolítico complejo generado ante los índices de contaminación producidos por la pastera y la flexibilización del control por parte de los Estados, la Acag “definió que el último domingo de abril se hará la XVII marcha, que se concentrará en Arroyo Verde, se irá hasta el puente y luego se concretará un acto en Arroyo Verde, para mantener todas las medidas sanitarias pertinentes”, indicó a esta Agencia el activista.

En ese sentido, precisó que la acción “será en vehículos, para que cada familia marche en su propia burbuja sanitaria y reducir los riesgos de contagio del Covid-19”, precisó Pretto.

Contaminación y falta de control
Cabe recordar que integrantes de la Acag advirtieron a AIM que la modificación del Digesto del río Uruguay aumenta los márgenes de contaminación en el curso del agua. Además, preocupa la ampliación de la planta química Kemira en Fray Bentos para abastecer también a UPMII.

La contaminación en el río Uruguay enciende las alarmas de los ambientalistas, ya que desde el 5 de diciembre de 2019 se flexibilizó la norma binacional que rige el curso de agua. Precisamente, “en la gestión de Mauricio Macri se hizo más permisivo el Digesto y se violó el principio de no regresión establecido en el Estatuto del río Uruguay al reducir la calidad del agua”, contó a esta Agencia Javier Pretto, integrante de la Acag, quien ejemplificó que “el fósforo que era de 005 pasó a 5 miligramos por litro, es decir, 100 veces más”.

En ese marco, Argentina pidió la suspensión y revisión del Digesto y la República Oriental del Uruguay (ROU) aceptó, “pero mientras se haga ese proceso de revisión de la flexibilización del Digesto aprobada en 2019 esa normativa seguirá vigente, por lo que se hacen tres proyectos del lado argentino para buscar una solución”.

Por otro lado, desde la Acag denunciaron la ampliación de la planta química Kemira (en Fray Bentos) para abastecer también a UPMII sin autorización Argentina. Es que Uruguay precisa el aval argentino, “ya que como UPM I está sobre la ribera del río Uruguay se tiene que hacer la consulta por el Tratado del Río Uruguay, pero la ROU envió los papeles pero no hay una sola foja que hable del estudio de impacto ambiental”. Ante ese escenario, “Argentina reclamó mayor información y ahora los cancilleres intentarán encontrar una solución, si no se resuelve se reunirán los presidente y si no hay acuerdo Argentina podrá ir al tribunal internacional de La Haya”.