Murió ayer a los 91 años en Buenos Aires el historiador y periodista anarquista Osvaldo Bayer, uno de los intelectuales más prestigiosos de la Argentina, nacido en la provincia de Santa Fe el 18 de febrero de 1927.

La noticia de su muerte fue confirmada a través de las redes sociales por su hija Ana: "Una noticia muy triste, murió mi papá". El mismo mensaje difundió  Ana en italiano y en  alemán,el idioma de sus ancestros: "Mein Vater ist soeben gestorben" (Mi padre acaba de morir)

Bayer es autor de obras fundamentales sobre las luchas obreras y la represión en la historia argentina, sobre todo de los movimientos anarquistas. Fue muy conocida, y llevada al cine, su obra sobre la Patagonia Trágica, cuando el mismo militar que asesinó  miembros de pueblos originarios en Formosa acabó mediante el crimen masivo con una huelga obrera en la Patagonia.

Por su posición invariablemente condenatoria de las actitudes de las familias patricias argentinas, Bayer sufrió cárcel, censura, persecución y amenazas, que no lograron doblegarlo nunca.

Debió exiliarse del país y fue uno de los que   denunció en el extranjero la represión de Estado de la última dictadura cívico-militar. Al volver en la década del '80 mantuvo firme sus convicciones.  Estuvo presente en cada reclamo obrero, campesino y de las comunidades originarias. La defensa de la ética y de los derechos humanos fueron su baluarte.

Bayer estudió historia en la universidad de Hamburg, en Alemania. Debutó como periodista en Noticias Gráficas y en La Chispa, un periódico que fundó en la Patagonia en la década de los años 50.  Entre 1959 y 1962 fue secretario del Sindicato de Prensa.

Perseguido por la Triple A que comandaba José López Rega, debió exiliarse en Berlín en 1975.

En 1963 durante una conferencia en la ciudad bonaerense de Rauch propuso cambiarle el nombre al pueblo por Arbolito.El coronel Federico  Rauch vino de Alemania a la Argentina contratado por Rivadavia para exterminar a los ranqueles; pero un ranquel llamado "Arbolito" lo sorprendió en la batalla de Las  Vizcacheras y lo mató. Los pobladores no aprobaron la idea, lo dejaron solo, y un ministro de Frondizi, descendiente de Rauch, lo hizo apresar y para humillarlo lo envió a la cárcel de mujeres.

Bayer también lanzó una campaña para trasladar el monumento de Julio Argentino Roca en la Diagonal Sur de Buenos Aires, por considerar que la "campaña del desierto", que no asoló ningún desierto, fue un genocidio perpetrado contra los pueblos originarios, que murieron por miles y los que fueron capturados fueron vendidos como esclavos en el Hotel de Inmigrantes, en  Buenos Aires.

Pidió que en el lugar donde está el monumento de Roca se levante otro, a la mujer originaria.

El concejo deliberante del partido bonaerense de Rojas, renombró en 2007 "Pueblos Originarios" a la calle llamada hasta entonces Julio Argentino Roca, a pedido de   alumnos de las escuelas locales basados en en sus investigaciones de Bayer. En la actualidad existen muchos proyectos similares.

En 1984 se le otorgó el Premio Konex, en 2003 la Universidad Nacional del Centro le otorgó el grado de Doctor Honoris Causa por su trayectoria en el campo de los derechos humanos, la literatura y el periodismo. Recibió el mismo título en las universidades nacionales de Córdoba, (2009), Quilmes (2009), San Luis (2006), Del Sur (2007), Del Comahue (1999) y de San Juan (2011).

Su salud se venía deteriorando  y el 24 de marzo pasado debió asistir al aniversario del golpe militar de 1976 en silla de ruedas. Vivía en el barrio porteño de Belgrano, donde siempre desfilaban estudiantes, escritores, periodistas y todo el que quería visitarlo era recibido.

Bayer es autor de títulos como “Los vengadores de la Patagonia Trágica”, “Los anarquistas expropiadores y otros ensayos” y “Severino Di Giovanni, el idealista de la violencia”

Frases de  Bayer

“En democracia, la autocrítica no significa dar un paso atrás sino uno adelante”

"Siempre me gustó investigar la suerte o la verdad sobre los más malditos de la sociedad"

"Sostengo, como eslogan, que mientras haya miseria no hay democracia”

"Las prostitutas de San Julián fueron las únicas que reaccionaron contra los soldados fusiladores de los peones rurales de la huelga del '21; cuando los soldados fueron a los prostíbulos, ellas los echaron al grito de 'no nos acostamos con asesinos'. Fue muy lindo ese acto"

"Estudié Historia en la Universidad de Hamburg y vi que la realidad tiene mucha más fantasía que la literatura. Es increíble. Entonces me dediqué a estudiar historia, los hechos, en un idioma que entendieran todo"

"El intelectual tiene que tener todas las libertades para escribir lo que se le da la gana, no se le puede poner norma ni prohibición. Eso sí, tiene la obligación moral de salir a la calle cuando ve injusticias en la sociedad, no quedarse en la torre de marfil. Por eso mi admiración por Rodolfo Walsh y por Haroldo Conti, que tomaron una posición en momentos tan difíciles para el país".

“Me pregunto que está pasando en la Argentina, que de perseguido por la Triple A, ahora me publican libros”.

"Siempre que hablamos de (Julio) Cortázar tengo el mejor de los recuerdos, como amigo y como escritor. Lo único que le dije una vez: vos no tendrías que haberte ido de la Argentina, porque creo que algo perdieron sus libros al irse a París".

De la Redacción de AIM.