En pleno desarrollo del juicio contra el cura Justo Ilarraz por los abusos en el Seminario de Paraná, Norma Romero, una de las fundadoras de la organización Con los gurises no e integrante de ASI Basta, se refirió a las expectativas que rodean a esta causa los avances legislativos y de la Justicia respecto del abuso infantil. “Hace unos 10 años se viene instalando el tema en la sociedad y hablando en los medios esto de lo que antes no se hablaba o se aceptaba”, dijo a AIM.[{adj:4492 alignright}]

Cuando en Urdinarrain iniciaron las acciones para denunciar al ex funcionario municipal, Javier Broggi, por corrupción de menores, la respuesta (automática) de la Justicia la causa había prescripto. “Te cerraban la puerta con que ya era un hecho viejo”, recordó Norma Romero.

Con el tiempo, hubo reformas legislativas como la llamada Ley Piazza, que extiende el tiempo de la prescripción 12 años después de cumplidos los 18 años, "porque es muy difícil que un niño pueda expresarse, y más en esa época porque nadie creía en la palabra del niño".

En 2015 salió la Ley 27.206 de Respecto al tiempo de las víctimas, impulsada por la senadora Sigrid Kunath, a partir de lo ocurrido con el caso Ilarraz. Con esta norma, los tiempos de la prescripción comienzan a regir a partir del momento en que las víctimas o los sobrevivientes, como prefieren llamarse, logran exteriorizar lo ocurrido.

“Tanto desde Así Basta y Con los gurises no, como de todas las instituciones que venimos trabajando contra el abuso infantil vivimos con mucha esperanza por el avance que está dando la justicia al llevar a juicio casos que vienen desde hace años”, dijo Romero a esta Agencia mientras se desarrolla el proceso contra Ilarraz.

"Es un caso emblemático en la provincia”, destacó y consideró que la decisión que tome la Justicia puede resultar decisiva para animar a víctimas de causas en curso que no se han animado a dar testimonio y para que salgan a la luz casos de abuso que se mantienen ocultos.

De hecho señaló que cuando se destaparon los abusos de Broggi "llegó a oídos de los sobrevivientes de Ilarraz". "Según me manifestó uno de ellos, les dio más fuerza para seguir adelante, para denunciar, para hablar", confió.

“Hace unos 10 años se viene instalando en la sociedad y hablando en los medios esto de lo que antes no se hablaba o se aceptaba. Creemos que la sociedad está empezando a reaccionar porque los niños que son abusados por pedófilos no es algo circunstancial, de un día. El pedófilo viene actuando de manera progresiva, se va acercando a los niños, con regalos, conquista a las familias y a veces es alguien que es miembro de la familia. Siempre es alguien que conoce al niño, que le gusta, que no, alguien muy cercano”, advirtió.