La glándula tiroides es una pequeña glándula, con forma de mariposa, situada en la base de nuestro cuello. Esta glándula produce y almacena las hormonas tiroideas, que afectan a la mayoría de células en nuestro cuerpo.
Cuando la glándula tiroides recibe la señal de la TSH (Thyroid Stimulating hormone), esta libera hormona tiroides en el torrente sanguíneo.
El hipotiroidismo es una condición en la que la generación de hormonas de la tiroides se ve reducida y debida a esa reducción se vuelve insuficiente para realizar sus tareas de manera funcional.
Se denomina hipotiroidismo primario cuando la glándula no libera hormonas tiroideas a pesar de recibir mucha señal de la TSH.
Aproximadamente el 90 por ciento del hipotiroidismo primario está causado por Hashimoto, una enfermedad autoinmune
Las hormonas tiroideas ayudan a controlar el crecimiento, la reparación celular o el metabolismo.
Síntomas derivados del hipotiroidismo
Fatiga crónica
Caída del cabello
Sensación de frío
Aumento de peso
Ciclos menstruales irregulares
Sangrado menstrual excesivo o prolongado
Piel pálida y seca
Uñas quebradizas
Aumento de peso inexplicable
¿Qué es la enfermedad de Hashimoto?
La tiroiditis autoinmune o enfermedad de Hashimoto se caracteriza por la destrucción de la glándula tiroides por acción del sistema inmune. Su nombre proviene del Dr. Hakaru Hashimoto, que describió la enfermedad por primera vez en el año 1912.
Afecta a 2.2 hombres de 100.000 y 498.4 mujeres de 100.000 al año en todo el mundo.
El tratamiento habitual se basa en la administración de hormona tiroidea y que ayuda a controlar los síntomas de hipotiroidismo en la mayoría de pacientes. Pero existe un porcentaje de personas con enfermedad de Hashimoto que no responden al tratamiento hormonal.
Causas de la enfermedad de Hashimoto
Origen genético. Hay ciertos genes, como los DUOX2, IYD, NKX2-5, etc, que predisponen al desarrollo de Hashimoto, y algunos de ellos están expresados en otras enfermedades autoinmunes.
Intolerancia al gluten. Existe una fuerte relación entre la enfermedad de Hashimoto y la celiaquía, en gran parte debido al mal funcionamiento del sistema inmune.
Disbiosis intestinal. Es habitual que en la enfermedad de Hashimoto nos encontremos con daño en la pared intestinal que provoca un aumento de la permeabilidad intestinal, lo que favorece que traspasen esta barrera sustancias que en condiciones de salud óptima no traspasarían.
Origen hormonal. Una posible explicación de que impacte más a las mujeres puede deberse a los niveles de estrógenos que impactan en la tiroides.
Gestión del estrés. Un estrés crónico puede llevar a una mayor actividad del sistema inmune que, a su vez, impacta sobre la glándula tioridea.
Alimentación para hipotiroidismo y Hashimoto
El manejo nutricional para hipotiroidismo y Hashimoto se basa en seguir una dieta antiinflamatoria, basada en:
Eliminar alimentos procesados
Eliminar de soja y derivados
Verduras, hortalizas y frutas de bajo índice glucémico
Pescados, sobre todo azules y de tamaño pequeño (por metales pesados)
Priorizar alimentos de producción ecológica
Reducir el uso de cereales a excepción de arroz, quinoa y trigo sarraceno
Reducir el consumo de crucíferas como las coles, brócoli, o coliflor
Fuente: Nutricion Stellaae
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