El Consejo del Salario volverá a reunirse la semana que viene para ajustar los valores del piso salarial en función de la pauta que resuelva el candidato presidencial y ministro de Economía, Sergio Massa.
El organismo que integran centrales obreras, cámaras empresarias y el Gobierno, reanudará actividades el jueves 13 con la premisa de ajustar el monto, que en la actualidad es de 87.987 pesos y cuya función esencial es actualizar los planes sociales que equivalen a la mitad del mínimo. Al igual que en el último debate, en marzo pasado, el Ejecutivo espera pactar un nuevo acuerdo de corto plazo, probablemente trimestral.
La resolución difundida ayer por la ministra de Trabajo, Raquel “Kelly” Olmos, presidenta del Consejo del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil, llama a los 32 miembros (la mitad corresponde a la CGT y a las dos versiones de la CTA, y el resto al sector empleador) a discutir de manera virtual desde las 14 el nuevo valor del piso de ingresos y de las prestaciones por desempleo.
La convocatoria estaba contemplada en el último acuerdo, pero las centrales obreras todavía no decidieron un criterio para acudir a la reunión. En rigor, desde la CGT -con absoluta mayoría en la representación sindical- dijeron que aguardarán una señal de Massa para acomodar el reclamo a su pedido.
Se trata de una dinámica asentada en los últimos años desde que el salario mínimo dejó de ser una referencia concreta para el sector privado formal y pasó a ser centralmente la medida para los planes sociales y sólo secundariamente una orientación para los contratos no registrados.
La posición de las últimas negociaciones bajo el mandato en Economía de Massa, sumado a las restricciones que impone en acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, no hacen prever un desenlace muy distinto de los acuerdos previos que se limitaron a acompañar el proceso inflacionario con los ajustes en cuotas del salario mínimo.
El encuentro de marzo pasado del Consejo del Salario terminó con el voto mayoritario (sólo se abstuvo la CTA de los Trabajadores y se pronunció en contra la CTA Autónoma) de los miembros por un incremento en tres cuotas del 26,6 por ciento que terminó de aplicarse el mes pasado, cuando llegó al valor actual de 87.987 pesos. Aquel debate no estuvo exento de tensión: el mecánico Mario Manrique (número dos de Smata y actual candidato a tercer diputado nacional por Unión por la Patria) reclamó de manera airada y sin éxito que se lo dejara hablar durante el debate y a continuación Pablo Moyano se desconectó de la sesión virtual sin llegar a votar, ofuscado por el resultado modesto de las deliberaciones, según explicó a continuación.