Una evaluación global muestra que las emisiones de metano causadas por el hombre podrían reducirse hasta 45 por ciento en la próxima década. Tales reducciones evitarían casi 0,3°C de calentamiento global para 2045. Po Norberto Ovando*. Especial para AIM.
El metano es un gas incoloro, inflamable, no tóxico, cuya fórmula química es CH4. En la atmósfera actúa como gas de efecto invernadero.
“Reducir el metano es la vía más eficaz que tenemos para frenar el cambio climático durante los próximos 25 años y complementa los esfuerzos necesarios para reducir el dióxido de carbono. Los beneficios para la sociedad, las economías y el medio ambiente son numerosos y superan con creces el costo. La cooperación internacional es indispensable para reducir las emisiones de metano lo más posible en esta década”, dijo Inger Andersen, Directora Ejecutiva de la agencia de la ONU.
Esta reducción contribuirá a cumplir con el objetivo del Acuerdo de París de limitar el aumento de la temperatura global a 1,5°C.
Una evaluación global del metano publicada por la Coalición Clima y Aire Limpio (Cac) y el Programa de las Naciones Unidas para el medio Ambiente (Pnuma) muestra que, el metano representa casi una quinta parte de las emisiones globales de gases de efecto invernadero y, ahora que el mundo está actuando para reducir gradualmente los hidrofluorocarbonos a través del Protocolo de Montreal, es el principal contaminante climático de corta duración que debe abordarse para hacer posible la meta de 1,5°C.
Sectores responsables
“Se estima que hasta el 60 por ciento del flujo actual de metano desde la tierra hasta la atmósfera es el resultado de actividades humanas”, dijo Abhishek Chatterjee, científico de la Asociación de Investigación Espacial de Universidades-Columbia, EE.UU.
El informe señala que la mayoría de las emisiones de metano causadas por el hombre provienen de tres sectores principales: combustibles fósiles, vertederos y agro-ganadero.
En el sector de los combustibles fósiles, la extracción, el procesamiento y la distribución de petróleo y gas representan el23 por ciento y la minería del carbón el12 por ciento de las emisiones respectivamente. En el sector de los desechos, los vertederos y las aguas residuales representan aproximadamente 20 por ciento de las emisiones. En el sector agrícola, las emisiones de ganado provenientes del estiércol y la fermentación entérica representan alrededor de 32 por ciento y el cultivo de arroz ocho por ciento de las emisiones.
La evaluación identifica medidas dirigidas específicamente al metano. Al implementar estas soluciones fácilmente disponibles, las emisiones de metano pueden reducirse 30 por ciento para 2030. La mayoría se encuentra en el sector de los combustibles fósiles, donde es relativamente fácil localizar y reparar las fugas de metano y reducir su liberación. También existen medidas específicas para los sectores de los residuos y la agricultura.
Ahora bien, las medidas específicas por sí solas no son suficientes. Aquellas medidas que no se dirigen exclusivamente al metano, como un cambio hacia la energía renovable, la eficiencia energética residencial y comercial y una disminución de la pérdida y el desperdicio de alimentos pueden reducir las emisiones de metano otro 15% para 2030.
Reducir las emisiones
Para reducir las emisiones de metano a nivel nacional, pero también mundial, debemos abordar las emisiones no solo del sector energético, sino también de los vertederos, la agricultura y las minas de carbón para alcanzar los objetivos climáticos en 2030.
Las emisiones de metano provocadas por el hombre están aumentando más rápido que en cualquier otro momento desde que comenzó a registrarse, en la década de 1980.
Los niveles de los dos gases de efecto invernadero antropogénicos más importantes, el dióxido de carbono fue en 2020 de 412.5 partes por millón (ppm) y el metano atmosférico en niveles récord llegó a 14.7 partes por mil millones (ppb), que es el mayor aumento anual registrado desde que comenzaron las mediciones sistemáticas en 1983. Ambos gases continuaron su aumento implacable en 2020 a pesar de la desaceleración económica causada por la respuesta a la pandemia del coronavirus, anunció la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos (Noaa).
Esto es motivo de preocupación porque el metano es un gas de efecto invernadero extremadamente poderoso, responsable de aproximadamente 30 por ciento del calentamiento global que ha tenido lugar desde la época preindustrial. La buena noticia es que, a diferencia del CO2, que permanece en la atmósfera durante cientos de años, el metano comienza a descomponerse rápidamente y la mayor parte desaparece al cabo de una década. Esto significa que disminuir las emisiones de metano ahora puede reducir rápidamente la tasa de calentamiento a corto plazo.
Compromiso para reducir el metano
Existe una creciente ambición de los gobiernos de hacer más para reducir el metano. En octubre de 2020, la Comisión Europea adoptó la Estrategia de la Unión Europea sobre el metano, que describe medidas para reducir las emisiones en Europa e internacionalmente.
El 29 de abril, el Senado de los Estados Unidos aprobó una votación bipartidista para restablecer las regulaciones de la era de Obama y controlar las fugas de los pozos de petróleo y gas. Esta exige a las empresas monitorear, conectar y capturar el metano en los sitios de perforación.
Durante la Cumbre de Líderes sobre el Clima del presidente Joe Biden del 22 al 23 de abril 2021, se hizo un llamado a reducir el metano.
El presidente de Estados Unidos comenzó la cumbre con un nuevo y ambicioso objetivo: recortar “a la mitad” las emisiones de efecto invernadero del país para 2030 con respecto a los niveles de 2005.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron marcó que, “Es importante que todos comencemos la lucha para reducir las emisiones de metano”.
El presidente Vladimir Putin, de Rusia, llamó, a la acción global sobre el metano al decir: “debemos tener en cuenta todas las causas del calentamiento global” y “sería extremadamente importante desarrollar una cooperación internacional amplia y efectiva en el cálculo y monitoreo de gases.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, también destacó un plan para reducir las emisiones de metano, mientras el presidente de Vietnam, Nguyen Xuan Phuc dijo que, “Vietnam planea reducir las emisiones de metano de la agricultura en un 10 por ciento para 2030”.
En la Cumbre, los ministerios de Energía de los Estados Unidos, Canadá, Noruega, Qatar y Arabia Saudita, que representan 40% de la producción mundial de petróleo y gas, establecieron el Foro cooperativo de productores de cero emisiones netas para crear estrategias pragmáticas de cero emisiones, incluida la reducción del metano.
Conclusión
“La actividad humana está impulsando el cambio climático”, dijo Colm Sweeney, Subdirector adjunto del Laboratorio de Monitoreo Global. “Si queremos mitigar los peores impactos, será necesario un enfoque deliberado en reducir las emisiones de combustibles fósiles a casi cero, e incluso entonces tendremos que buscar formas de eliminar aún más los gases de efecto invernadero de la atmósfera”.
Fuente. ONU/NASA/Aapn
* Presidente / Asociación Amigos de los Parques Nacionales (Aapn)
Experto Comisiones Mundial de Áreas Protegidas (Wcpa) y,
Educación y Comunicación (CEC)
Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (Iucn)