En barrio Paraná XVI personal municipal desarrolla desde el miércoles diversas intervenciones, para optimizar los caudales y presiones del suministro. Abarca la normalización del funcionamiento de válvulas, desincrustración y limpieza de redes, verificación tanque por tanque del funcionamiento del ingreso y egreso de agua potable, y reparaciones de cañerías, entre otras.

En algunos sectores de la jurisdicción comprendida entre las calles República de Siria, Acebal, 1° de Mayo y Casiano Calderón, se registraron niveles bajos de presión de agua, por lo que se programaron una serie de intervenciones, que se encuentran aún en plena ejecución.

La tarea planificada está a cargo de profesionales y operarios de la Subsecretaría de Obras Sanitarias, en coordinación con la Secretaría de Servicios Públicos.

Uno de los frentes de trabajo se focalizó en la recuperación y funcionamiento de válvulas en la red distribuidora que se encontraban inactivas o presentaban fallas, lo que impactaba en el normal paso del agua.

Por otra parte, sobre calles Ñandubay, Clark y Casiano Calderón, se siguen efectuando acciones de limpieza de las cañerías, afectadas por la acumulación o sedimentación de partículas, que también afectan el flujo de caudales.

Al mismo tiempo, se están realizando tareas de inspección y verificación, tanque por tanque, para constatar el ingreso y la salida de agua que abastece posteriormente a las viviendas. Son unas 15 cisternas elevadas situadas en el barrio, que proveen del suministro a casi 300 familias: en cada uno de ellos se está desarmando el sistema de ingreso de agua, para lograr su desobstrucción.

Se desarrollaron también, durante estos días, arreglos de cañerías distribuidoras, en caso de detectarse pérdidas, sean en la vía pública o con fugas subterráneas. En ese sentido, se hicieron cinco reparaciones, entre ellas en un conducto de 160 milímetros en calle Ñandubay, entre Clark y Burmeister; y de 100 milímetros, en la esquina de calles Ñandubay y Clark.