Las cianobacterias o algas verdes azuladas son organismos microscópicos que se reproducen como consecuencia de la sobrecarga de nitrógeno y fósforo en relación con condiciones ambientales como la presencia de luz y altas temperaturas.
En el río Gualeguaychú, más cerca de la desembocadura, desde hace días se observa un manto de algas. Este proceso es conocido como “verdín” o floraciones algales, las cuales se pueden observar dependiendo la densidad y acumulación por la sobrecarga de nitrógeno y fósforo.
Estas floraciones se encuentran asociadas, a las actividades antrópicas que funcionan como aportantes de nutrientes para facilitar la reproducción y consecuentes floraciones.
Las algas se vienen arrastrando desde “río arriba” por el Río Uruguay, donde la suma de factores como el nitrógeno y fosforo más las condiciones climáticas actuales sequías, altura del río baja, altas temperaturas, permitieron la reproducción del verdín.
En caso de tomar contacto con el agua y las floraciones de estas algas se recomienda que se limpien con agua limpia, evitando el ingreso por la boca, piel, ojos y oídos para evitar que nos ocasionen problemas gastrointestinales como cólicos, diarreas y vómitos, y también algunas alergias en la piel.
Los factores contaminantes
La falta de tratamiento de efluentes cloacales en ciudades vecinas y que se encuentran a orillas del Río Uruguay y de comunidades que se encuentran en la cuenca del Rio Gualeguaychú.
El aporte de nitrógeno y fosforo a partir del desarrollo de actividades agrícolas extrativistas que se desarrollan en los campos de todo el territorio entrerriano, la aplicación de agrótoxicos y fertilizantes que a través del lavado de suelos erosionados arrastran a los nutrientes hacia los cuerpos de agua dulce.
La producción y explotación ganadera a través de la cría intensiva a gran escala como por ejemplo feed lots, criaderos de pollos, producción de cerdos, entre otros, las cuales en muchas oportunidades cuentan con sistemas de tratamiento deficientes o descargas inadecuadas en cuerpos receptores de agua, aumentando aún más, la carga de nutrientes.
Por último, y no menos importante, la producción de la pastera Botnia – UPM realiza descarga de fosforo y nitrógeno a escasos kilómetros sobre el Río Uruguay en la ciudad vecina de Fray Bentos, lo que acumula la carga de nutrientes que alimentan a las algas verdes azuladas y que motivan su crecimiento acelerado, entre otras actividades del hombre.
El HCD sancionó la ordenanza 12173/2017 de sistemas de tratamiento alternativos de efluentes cloacales que tuvo como objetivo evitar la descarga de efluentes sin tratamiento de forma directa al río Gualeguaychú, logrando que los emprendimientos de la zona ribereña cuenten con sistemas óptimos.
En tanto el Plan de Alimentación Sana, Segura y Soberana, busca que la producción de alimentos sea de forma segura y libre de agrotóxicos, prohibiendo la venta, almacenamiento y aplicación de glifosato en todo el ejido de la ciudad, así como la prohibición de cualquier tipo de aplicación de agrotóxicos en zona de quintas, chacras e industrias. Y que propone la producción de alimentos de forma amigable con el ambiente.
En cuanto a la lucha ciudadana en contra de la instalación de la pastera Botnia- UPM, siempre se han acompañado los reclamos por parte de la comunidad de Gualeguaychú en pos de cuidar la ciudad de toda la población.
Fuente: Diario El Argentino