El Fondo Verde para el Clima aprobó la financiación luego de ver los resultados de la deforestación evitada en el país; las zonas del país donde se realizó aquel proceso son el Parque Chaqueño, la Selva Tucumano Boliviana, en el Espinal y la Selva Misionera; de los 15 proyectos que la GCF apoya, siete se desarrollan en América Latina.
El Fondo Verde para el Clima (GCF, por sus siglas en inglés) otorgó 82 millones de dólares a la Argentina como retribución a la reducción de la deforestación en el Parque Chaqueño, la Selva Tucumano Boliviana, en el Espinal y la Selva Misionera.
La organización mundial aprobó la financiación luego de ver los resultados de la deforestación evitada en el país. De los 15 proyectos que la GCF apoya, siete se desarrollan en América Latina por un valor superior a los 300 millones de dólares. Argentina tiene el proyecto más importante en materia de bosques, según indicó el representante ad interim para FAO Argentina y Uruguay, Tito Díaz Muñoz.
Así se dio comienzo al Proyecto de Pagos Basados en Resultados de REDD+, una herramienta de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que busca reducir las emisiones provocadas por la deforestación y la degradación de los bosques en los países en desarrollo, al cual adhirieron las 23 provincias argentinas.
El organismo fomenta el diálogo intersectorial y fortalecimiento de la gobernanza forestal; promueve prácticas ganaderas sostenibles que resguarden los bosques nativos; y aumentarán las oportunidades económicas y sociales a través de la diversificación de los medios de vida y la exploración de oportunidades de mercados.
El proyecto es liderado por el Gobierno, a través del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, con el acompañamiento de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), y el financiamiento del GCF.
La secretaria de Política Ambiental en Recursos Naturales, Beatriz Domingorena, destacó que "es una construcción colectiva que cuenta con el aporte de cada una de las provincias, la síntesis de la participación y la decisión política e institucional".
Agregó que más de 7 mil familias, 2.900 comunidades locales, mujeres rurales y pueblos originarios que viven y dependen de los boques se beneficiarán del proyecto. A su vez, traerá un desarrollo favorable en siete cuencas forestales sostenibles, 95 planes integrales del manejo comunitario y 92 planes integrales de manejo de bosques y ganadería.
Por su parte, el presidente del Consejo Federal de Medio Ambiente (Cofema), Santiago Azulay, dijo que "las provincias supieron tener la madurez política e institucional para conformar esta única voluntad del pueblo".
La coordinadora REDD+, Serena Fortuna, manifestó que "este es el primer proyecto aprobado por el GCF para Argentina en el sector de bosques y uso de la tierra" y celebró que el país continúe invirtiendo en la conservación de sus bosques, a través de la Ley de Bosques y su Plan Nacional de Acción sobre Bosques y Cambio Climático.