La estadounidense Nmex Resources Corporation anunció una inversión de 500 millones de dólares para construir una planta de producción de hidrógeno verde y el parque eólico que la proveerá de energía. Ambos estarán en la localidad de Río Grande, Tierra del Fuego.
El parque eólico tendrá una capacidad de hasta 300 megawatts (mw), con 160 Mw de base. En tanto, la planta de electrólisis permitirá obtener más de 55 toneladas de hidrógeno verde por día.
El objetivo, indicó la empresa, es desarrollar una unidad de conversión de amoníaco o metanol de 300 toneladas diarias para exportar al resto del mundo. Esos envíos, agregó, serán a través de una infraestructura de carga marítima propia.
Es el segundo proyecto de envergadura que se anuncia en la Argentina para la producción de este tipo de energía, después de los 8400 millones dólares para una planta y un parque eólico en Río Negro que, en noviembre, anunció el grupo australiano Fortescue Future Industries, que tiene al ex rugbier Agustín Pichot como presidente en la región. La fase piloto de esta iniciativa, que ya está en marcha, contempla un desembolso de 1200 millones de dólares hasta 2024.
"Elegimos ubicar el proyecto en Río Grande por las condiciones de viento. Sabemos que, a esa misma latitud, del lado chileno, ya hay desarrollos de este tipo muy avanzados", explica Nabil Katabi, gerente de Financiamiento de Proyectos de Nmex, empresa especializada en energías renovables basada en Texas.
La potencia eólica en ese punto de Tierra del Fuego, amplía el ejecutivo, es de 11 metros por segundo. "Eso lo pone en clase mundial. Además, es un viento constante, sin variación, lo que ayuda a la generación. Y la zona también ofrece mucha disponibilidad de agua, sin necesidad de desalinizar", apunta.
Al margen de los recursos naturales y la ubicación geográfica -con salida al Atlántico pero muy cercana también al Pacífico-, hubo otros factores que propiciaron la inversión en Tierra del Fuego. "El marco provincial de zona franca ayuda bastante desde el punto de vista impositivo. Hay incentivos ahí", admite, en relación al régimen de Promoción Industrial que rige en la isla.
De los 500 millones de dólares, el 60 por ciento será para el parque eólico y el 40 por ciento para desarrollar la planta de electrólisis. "La etapa preliminar ya pasó y ahora estamos relevando la información técnica para, en tres o cuatro meses, ya tener una definición en cuanto a qué tipo de turbina, cuántas y de cuántas hectáreas necesitaremos", explica Katabi. Nmex utilizará aerogeneradores de su partner tecnológico global, Siemens Gamesa.
"Luego, seguiremos con la fase comercial, con encontrar un comprador. Después, nos tomaríamos unos seis a ocho meses para armar la financiación", continúa el ejecutivo. En tal sentido, indica que hay diálogos ya iniciados con bancos de inversión. "Una vez estructurada la financiación de esos 500 millones de dólares, calculamos que llevará otros dos a tres años que el proyecto entre en funcionamiento", apunta. En consecuencia, el deadline será para algún punto entre 2025 y 2026.
Expertos en proyectos llave en mano
El core de Nmex es desarrollar proyectos que, luego, ofrece llave en mano. "Una vez financiado, estructurado, puede ser vendido a un major o a alguien más grande en la industria", reconoce Katabi.
La planta a instalarse en Río Grande, informó Nmex, prevé la generación de 1500 puestos de trabajo durante su construcción y hasta 300 empleos calificados fijos cuando ingrese en operación.
Fundada en 1989, Nmex construyó y operó plantas termoeléctricas, oleoductos y gasoductos, refinerías de petróleo y plantas de etanol. También, exploró y operó yacimientos de petróleo y gas. Con 25 años de trayectoria en Perú, desde 2017 se concentró en Texas con dos tipos de proyectos: refinerías de cero emisiones -es decir, de combustibles sin azufre- e hidrógeno verde. Sobre estos últimos, además del que desarrollará en la Argentina, tiene proyectos en Texas y analiza opciones en Perú y Marruecos. Todos, con tecnología de Siemens Gamesa.
"Para producir hidrógeno verde, se necesita electricidad de fuente renovable. Eso, además, permite acceder a toda clase de incentivos, como créditos de carbono, en los Estados Unidos, Europa y Asia", explica Katabi. "Río Grande tiene un potencial eólico top-5 en el mundo. Permite un factor de carga alto, de más de 60 por ciento, cuando Francia y Alemania están entre 30 por ciento y 35 por ciento", resalta, una vez más, sobre el potencial de la segunda ciudad más importante de Tierra del Fuego después de su capital, Ushuaia.
Aunque el parque eólico se concibió para alimentar los 160 Mw base que necesita el proyecto, el ejecutivo reconoce que existen conversaciones para que una parte de su generación -entre 25 y 30 Mw- sean para la Provincia de Tierra del Fuego, hoy sin conexión al sistema eléctrico nacional y dependiente del gas para su abastecimiento energético. "Sobre un total de 300 Mw de capacidad, una parte será para el Gobierno provincial, bajo un esquema aún por definir", comenta.
Fuente: Cronista