Detenido en Siria, sin perspectivas de cumplir su plan de voltear todos los gobiernos del Medio Oriente como hizo con Iraq y Libia, corrido de  Venezuela, atascado en Afganistán, derrotado  tecnológicamente por  el 5G chino y por las nuevas armas rusas, al Imperio  de los Estados Unidos le queda la carta de la destrucción  universal.

Como dice la historia de algunos autócratas, cuando iban a morir o habían perdido una guerra, no se limitaban a su muerte personal: hacían matar a todas sus mujeres, a sus colaboradores y en general a miles de personas y a animales que estaban vinculados a ellos en la vida y debían acompañarlos en la   muerte.

La etapa crepuscular del imperio es como la de un anciano que durante su vida estuvo acostumbrado a gobernar su familia sin que "ningún buey le salga bravo";  pero en la declinación que no quiere aceptar a pesar de las evidencias, no consigue respeto ni audiencia,  y debe tolerar respondones que antes  hubiera castigado.

El imperio conserva poder militar, pero no ya hegemónico; tiene industrias, pero radicadas "off shore" en el extranjero mientras algunas de sus ciudades, como Detroit, están en ruinas; pero mantiene el dólar como moneda de reserva al punto que voltea gobiernos  y mata sin piedad por sostener esta última trinchera.

Algo parecido envuelve la desaparición de un imperio que no se produce sin convulsiones, salvo que en este caso podrían ser de tal calibre que el mundo desaparezca con él.

La edad de la riña

Nuestra era moderna de  niños viejos, de riña y confusión, de desintegración y prepotencia, es la que los hindúes hace miles de años llamaron "kali yuga", edad oscura, del fin de un ciclo, previa a la destrucción de la civilización.

De ella, los Purana de la India antigua ofrecieron esta descripción, que en algunos puntos recuerda los hechos de hoy:

.Los ladrones se convertirán en gobernantes, y los gobernantes serán  ladrones.

• Los gobernantes confiscarán la propiedad y la usarán mal; dejarán de proteger a la gente.


• Hombres viles que han obtenido  conocimiento sin las virtudes necesarias para usarlo serán estimados como sabios.


• Habrá muchas personas desplazadas, vagando de un país a otro.


• Los fetos serán asesinados en los vientres de sus madres.


• La gente preferirá elegir ideas falsas.


• Nadie será capaz de confiar en alguien más.


• La gente será envidiosa.


• Habrá muchos niños cuya esperanza de vida no será superior a 16 años.


• Gente sufriendo de hambre y miedo buscará protección en refugios subterráneos.


• Las muchachas jóvenes harán comercio con su virginidad.


• Las  nubes serán inestables en la distribución de las lluvias.


• Los comerciantes harán negocios deshonestos.


• Habrá muchos mendigos y gente desempleada.


• Cada uno hará uso de un lenguaje duro y vulgar.


• Los hombres se dedicarán a ganar dinero; los más ricos tendrán el poder.


• Los líderes del Estado ya no protegerán a la gente, sino que mediante impuestos, se apropiarán de toda la riqueza.


• El agua escaseará.


• Alimento pre-cocinado (comida chatarra) estará en venta.