Cincuenta años después del lanzamiento del Apolo 11, el 16 de julio de 1969, una gran parte de la Tierra pudo contemplar este martes un eclipse parcial de Luna. En Paraná se observó a simple vista a partir de las 18:45, aunque la etapa penumbral concluyó pasadas las 21:15.
Privada de los rayos del Sol, la Luna se ensombreció y adquirió un tono anaranjado, debido a que la atmósfera terrestre desvió los rayos rojos de la luz solar hacia el interior del cono de su sombra.
El eclipse fue visible desde América del Sur, África, desde una gran parte de Europa y de Asia y la parte occidental de Australia, explicó a través de un comunicado la Royal Astronomical Society (RAS) de Londres.
En Paraná y Oro Verde
La luna pudo contemplarse parcialmente eclipsada a partir de las 18:45. Quienes transitaban por el Acceso Norte, tuvieron la oportunidad de verla en todo su esplendor, además, porque es luna llena. Pero también, el eclipse lunar se vivió de una manera muy especial en el observatorio de Oro Verde.
En un momento la composición del cielo se dividió en el celeste del horizonte, la luna eclipsada en un 70 por ciento por la tierra y el púrpura característico del atardecer.
Se trató del segundo eclipse lunar de este año y se lo vio en forma parcial, ya que la alineación del Sol, la Tierra y la Luna llena no se encontraban en forma recta.
Desde nuestro país, el evento astronómico se vio recién a partir de las 18:45. La etapa penumbral concluyó en Argentina a las 21:15.
Cuándo ocurre
El eclipse lunar tiene lugar cuando el Sol, la Tierra y la Luna están alineados y la Luna queda en el cono de sombra producido por la Tierra. Fue parcial, por lo que la Luna no quedó totalmente a oscuras. Pero "alrededor del 70 por ciento de la superficie visible de la Luna quedó cubierta por la sombra", explicó la RAS.
"Es cierto que la luna da vueltas alrededor de la Tierra todos los meses, pero no siempre se interpone en la sombra de la Tierra. La trayectoria lunar alrededor de la Tierra está inclinada en comparación con la órbita de la Tierra alrededor del sol. La Luna puede estar detrás de la Tierra e incluso así recibir luz solar. El eclipse lunar es un acontecimiento especial", indicó la Nasa en su página web.
El dato
A nivel personal, los eclipses de Luna movilizan cuestiones emocionales, son un énfasis en determinada energía y tienen un impacto profundo sobre las aguas del inconsciente. Esto influye en los sueños, en el cuerpo, en las emociones y en la fluidez con la que las personas se expresan.
De la Redacción de AIM.