Un informe oficial determina que desde el sábado a la noche hasta las primeras horas del martes los clientes de Edelap afectados por el apagón en La Plata perdieron más de 960 millones de pesos por alimentos que tuvieron que desechar y por lucro cesante, en el caso de los comercios.
En el mediodía de este martes se cumplieron 63 horas de interrupción del servicio en la zona norte de la capital bonaerense. El último reporte de la empresa distribuidora Edelap admite que el desperfecto que provocó la interrupción recién quedaría superado "el jueves a la noche". O sea, extendió un día y medio más la normalización, prevista originalmente para el miércoles.
A las complicaciones individuales o familiares se agregan los trastornos colectivos. Según informaron en el ministerio de Educación provincial, hay 30 escuelas de los niveles inicial, primaria y secundaria sin clases por falta de luz. Son unos 20 mil alumnos que han perdido uno, dos y podrían ser tres jornadas de actividad escolar.
El cálculo de costos económicos del incidente provocado por la rotura de un cable de alta tensión en la zona de City Bell, lo realizó la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires. Utilizó una fórmula que combina el número de usuarios desconectados a la electricidad, la cantidad estimada de comercios registrados en la zona y un monto aproximado del valor de la comida fresca que un hogar tipo debe descartar por falta de refrigeración.
El estimativo ubica 50 mil usuarios desenchufados por la falla de Edelap el sábado; 30 mil el domingo y 15 mil el lunes. Evalúa que cada hogar "tira" 2.000 pesos de productos alimenticios; promedia 20 mil pesos por daños en equipos o por rotura de electrodomésticos y pone como valor del lucro cesante para los locales comerciales unos 25 mil pesos por día.
El informe de la Defensoría aclara que las estimaciones se hicieron considerando que "el 30 por ciento de los hogares" tendrá algún desperfecto en un aparato y que el 25 por ciento de los clientes tiene tarifa "comercial". Así, llega a 961 millones como monto de pérdida, calculada hasta el último minuto del lunes.
Pero puede ser aún más alto. Este martes, en el Organismo de Control de la Energía de Buenos Aires (Oceba) estimaban que entre 3.500 y 4.000 medidores estaban fuera de línea. Esto representa poco más de 10 mil vecinos de Villa Elisa, City Bell, Gonnet, Gorina y Villa Castells que continuaban con los padecimientos por la falta del suministro.
"Vamos a pedir a los gobiernos provincial y Nacional las máximas sanciones. Esto no puede ocurrir con los ajustes de tarifas que hubo en los últimos años", dijo el Defensor del Pueblo, Guido Lorenzino.
Ese ente regulador también hace cálculos para eventuales sanciones. Según dijo el presidente del Oceba, Jorge Arce, "cuando se restablezca el último usuario comenzaremos a hacer las evaluaciones. Pero está decidido: habrá una sanción económica contra la empresa y ese dinero será reembolsado a los afectados".
Según Arce, los clientes no tienen que hacer trámites. "En el ente tenemos el detalle de cada uno de los usuarios que tuvieron interrumpido el servicio. Debemos revisar la cantidad de horas que se quedaron sin suministro para determinar el valor del resarcimiento", explicó. El funcionario dijo que se monitoreó desde el primer momento en que se informó el desperfecto y que supervisaron el plan de contingencia que presentó Edelap.
Este programa para la emergencia incluyó la contratación de equipos generadores que llegaron a La Plata desde Rosario. Sin embargo la reconexión también tuvo deficiencias y algunos equipos instalados no proporcionaron energía.
Esa situación agravó el fastidio. Y también provocó reacciones políticas. El intendente de La Plata, Julio Garro (Cambiemos) primero pidió una "dura sanción" para Edelap. Y este martes por la mañana anunció que reclamará "la rescisión del contrato de concesión" que otorgó el ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos a la compañía que opera en La Plata, Berisso, Ensenada, Punta Indio, Magdalena y Brandsen. “Vamos a ir a fondo hasta pedir la quita de la concesión, porque uno puede soportar un inconveniente momentáneo, pero no más de 50 horas sin luz”, dijo el alcalde platense.
"El esquema de emergencia fue impresentable. Una vergüenza. No cumplieron nada de lo que prometieron. Fueron corriendo todos los plazos y los horarios. Entendemos la bronca de los vecinos por esta situación", admitió el jefe del Gabinete de la comuna, Oscar Negrelli. Más aún: el apagón alumbró otras repercusiones políticas. En la Legislatura representantes del oficialismo y la oposición pidieron que citen a autoridades de Edelap, que conduce el empresario Rogelio Pagano.
En los bloques opositores aprovecharon para apuntar contra el gobierno provincial, responsable del otorgamiento de la licencia y del cumplimiento de los planes de obras que se comprometieron cuando las autoridades habilitaron los aumentos en las tarifas.
Edelap explicó que con las tareas de "restituciones de servicio" que se realizaron en la madrugada del martes se abastece a puntos estratégicos, pero se trata de una "operación compleja que presenta intermitencias". Por eso pide a los usuarios de la zona norte que "ante la recuperación del servicio desde los generadores procuren utilizar solo los artefactos extremadamente necesarios".
El lunes a la noche, aún con el clima adverso, Edelap siguió en la obra mayor que requiere la reparación de la avería del cableado subterráneo de 132 kV (kilovolts) que sufrió la salida de servicio el sábado por la noche afectando a la Subestación City Bell, sobre el Camino Centenario y calle 476. Se estima la finalización de estas tareas hacia la noche del jueves.