La elevada temperatura ambiental contribuye a aumentar la temperatura corporal a la hora de hacer ejercicios físicos, generando distintas reacciones fisiológicas en el organismo para defenderse del calor. En esta nota, le haremos saber cuáles son y qué problemas pueden presentarse. Además, le contaremos qué medidas preventivas deben tomarse para evitar riesgos en la salud. Por el profesor de Educación Física Matías González. Especial para AIM.
El hecho de practicar alguna actividad física en época de altas temperaturas, provoca que el cuerpo incremente la irrigación sanguínea en la piel, así como también la sudoración. Este proceso interno, denominado termorregulación, tiene como objetivo eliminar el calor acumulado en el interior y, de esta manera, disminuir o mantener la temperatura del cuerpo.
El cuerpo, para poder enfriarse, disminuye la cantidad de sangre en los músculos y envía ésta a circular a través de la piel. Si la humedad también es alta, el cuerpo se enfrenta a más estrés ya que el sudor no se evapora fácilmente y esto podría aumentar, aún más, la temperatura interna.
Señales de advertencia
Al realizar actividad física en los días de calor, se debe prestar atención a los signos y síntomas de las enfermedades relacionadas con el aumento de temperatura. Si se ignoran los síntomas, el estado puede empeorar y provocar una urgencia médica. En condiciones normales, la piel, los vasos sanguíneos y el nivel de transpiración se ajustan al calor, pero los sistemas de enfriamiento natural pueden fallar si estamos expuestos a altas temperaturas y a altos niveles de humedad y, como consecuencia, se pueden sufrir:
1. Calambres.
2. Agotamiento.
3. Golpe de calor.
4. Dolor de cabeza.
Si presenta alguno de estos síntomas, debe bajar la temperatura corporal e hidratarse de inmediato. Dejar de hacer ejercicio inmediatamente y salir del calor. Si es posible, pedirle a alguien que se quede con usted para ayudarlo a controlar su estado.
Medidas preventivas
ü Organizar la actividad física a primera o última hora del día para evitar el fuerte estrés del calor al mediodía.
ü La indumentaria debe ser preferente de colores claros y holgada, no demasiada ropa para permitir una mejor termorregulación.
ü Hidratarse cada 10 minutos. No se debe esperar a sentir sed para tomar agua, ya que ésta es la primera señal de deshidratación.
ü Evitar hacer actividad al aire libre cuando la radiación solar es alta.
Consultar al especialista
Si tiene signos de insolación, necesitará ayuda médica inmediata. Si su temperatura central es inferior a 40 °C, pero no baja rápidamente, también requerirá atención médica urgente. En algunos casos, es posible que necesite líquidos a través de sondas intravenosas, si no puede beber o ingerir lo suficiente.
Obtenga la autorización de su médico antes de volver a realizar ejercicio, si ha sufrido una insolación. Es probable que el profesional le recomiende que espere para volver a su entrenamiento, hasta que no presente síntomas. Además, es posible que necesite varias semanas antes de poder retomar a alto nivel. Una vez que el médico lo autorice, puede comenzar durante períodos cortos de tiempo y aumentar progresivamente a medida que se adapte al calor. ¡Con precaución, que el calor no impida la actividad física!
NdR: Articulo publicado en el Material Educativo correspondiente a febrero de 2022, de Icarus Centro de Salud & Longevidad.
Dejá tu comentario sobre esta nota