De origen árabe, el uso y consumo de las albóndigas se extiende a lo largo y ancho del planeta, aunque en cada país y región se elaboran de forma distinta. Esta forma redonda y su forma de cocinarlas se ha transmitido de generación en generación desde hace siglos, con diferentes derivados de su nombre original, al-bunduqa, ‘la bola’.
En España suelen elaborarse con carne de vacuno picada o una mezcla de ternero y cerdo. Como salsa de acompañamiento, es común encontrarlas bañadas en salsas de tomate o de diferentes verduras, aunque una de las más conocidas es la salsa de cebolla y vino blanco que se explica a continuación. En cuanto a las guarniciones, hay quien las acompaña de arroz, patatas o verduras… En definitiva, no hay una única receta para preparar este plato de toda la vida, aunque sí unas directrices básicas para su elaboración.
Se trata de una receta llena de sabor tradicional con la carne como principal protagonista, acompañada de una salsa pasada por la batidora para que tenga una estupenda textura cremosa. A esta salsa se le pueden añadir las verduras que queramos, pimiento verde o zanahoria, por ejemplo, o unos guisantes enlatados como toque final.
Para que las albóndigas tengan un toque de sabor extra, esta receta incluye especias como el perejil fresco. A la hora de cocinar estas bolas de carne tenemos tres opciones: podemos hacerlas fritas, con bastante aceite; doradas en la sartén con menos grasa, o al horno o freidora de aire. Con estas últimas opciones es más probable que nuestras albóndigas se deformen, por lo que sería conveniente dejar reposar la mezcla durante unos diez minutos.
Receta de albóndigas en salsa
Tiempo de elaboración: 35 minutos/ Raciones: cuatro personas
Ingredientes:
750 g de carne picada (cerdo, ternera o mixta)
2 huevos
150 g de pan de molde
1 cucharada de perejil fresco picado
3 dientes de ajo
100 ml de leche
Harina de trigo para la salsa y para rebozar las albóndigas
2 cebollas
1 zanahoria
500 ml de caldo de pollo
200 ml de vino blanco
Sal
Pimienta negra
Aceite de oliva virgen extra
Elaboración:
Picamos un diente de ajo y lo añadimos a un bol con la carne, los huevo, la miga de pan remojada en la leche, una cucharadita de perejil picado y una pizca de sal. Mezclamos todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea. Formamos las albóndigas y las pasamos por harina.
En una sartén con aceite de oliva, freímos las albóndigas hasta que se dore su exterior. Las sacamos y reservamos en un plato con papel absorbente mientras elaboramos la salsa.
Picamos dos dientes de ajo, la zanahoria y las dos cebollas, y las añadimos a una sartén con un chorro de aceite calentada a fuego medio. Una vez la cebolla quede traslúcida, añadimos una cucharada de harina y el vino y dejamos reducir mientras removemos. Agregamos el caldo de pollo y dejamos cocinar la verdura durante 15 minutos.
Trituramos la salsa con la batidora y la devolvemos a la cacerola. Añadimos también las albóndigas y dejamos que cueza durante cinco minutos. Pasado este tiempo, apagamos el fuego y tapamos, dejando reposar unos minutos antes de servir.
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