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¿Qué encontraron en algunas comidas rápidas?

La mayoría de las cadenas de restaurantes depende de las carnes vacuna y de pollo, provenientes de operaciones concentradas de alimentación animal (Cafo, por sus siglas en inglés), donde usan medicamentos veterinarios de rutina. De 10 muestras de comida rápida analizadas en Estados Unidos, ocho dieron positivo en la prueba de medicamentos veterinarios. Taco Bell, Dunkin', Wendy's, Domino's, Burger King y McDonald's, en la mira.


De las 10 muestras de comida rápida, 6 (Taco Bell, Dunkin', Wendy's, Domino's, Burger King y McDonald's) tuvieron un ionóforo antibiótico veterinario llamado monensina, que no está aprobado para uso humano porque puede causar daños graves.

De 43 almuerzos escolares analizados, el 95 por ciento tuvo niveles detectables de glifosato, un herbicida cancerígeno y disruptor endocrino que se relaciona con la inflamación del hígado, trastornos metabólicos, enfermedades cardiovasculares y cáncer.

En el 100 por ciento de los almuerzos escolares analizados se encontraron metales pesados ??en niveles hasta 6293 veces superiores a los niveles máximos permitidos en el agua potable. En cuanto al cadmio y el plomo, los niveles fueron los más altos.

De las 10 muestras de comida rápida analizadas, ocho tenían medicamentos veterinarios
En septiembre de 2023, la organización Moms Across America (MAA) envió muestras de comida de 10 cadenas de comida rápida al Health Research Institute, que es un laboratorio sin fines de lucro que analiza los alimentos en cuanto su contenido de nutrientes, contaminantes y toxinas. Cada muestra de alimento fue analizada para detectar la presencia de 104 de los medicamentos veterinatios y hormonas más comunes.

Las muestras incluyeron comidas de McDonald's, Starbucks, Subway, Chick-fil-A, Burger King, Taco Bell, Chipotle, Dunkin', Wendy's y Domino's. De estos, sólo las muestras de Chipotle y Subway no contuvieron medicamentos veterinarios.

Esto no es tan sorprendente, considerando que la mayoría de las cadenas de restaurantes dependen de la carne vacuna y de pollo provenientes de operaciones concentradas de alimentación animal (Cafo), que utilizan medicamentos veterinarios de rutina. Según MAA: "Debido a las condiciones en las que se llevan a cabo las operaciones concentradas de alimentación animal, que incluyen espacios muy reducidos e insalubres, y con una alta incidencia de enfermedades, la mayoría de la carne convencional de los Estados Unidos proviene de ganado tratado con antibióticos, hormonas de crecimiento y un antiparasitario que también es un conocido anticonceptivo aviario".

Seis de 10 contienen antibióticos muy riesgosos
De las 10 muestras de comida rápida, 6 (Taco Bell, Dunkin', Wendy's, Domino's, Burger King y McDonald's) tuvieron un antibiótico ionóforo veterinario llamado monensina, que no está aprobado para uso humano porque puede causar daños graves. La muestra con mayor concentración (Taco Bell) tuvo 0.64 microgramos (mcg). El consumo "aceptable" es de 12.5 mcg/kg de peso corporal al día.

La monensina también tiene una serie de efectos secundarios en animales, incluyendo anorexia, diarrea, depresión, ataxia, degeneración del corazón y de los músculos esqueléticos, necrosis y muerte.

El antibiótico ionóforo narasina, que causa los mismos efectos secundarios en animales que la monensina, se encontró en cuatro de las 10 muestras (Wendy's, Dunkin', Domino's y Starbucks). La hamburguesa con queso de Wendy's tuvo la concentración más alta, 1.53 mcg. Las otras tres sólo tuvieron trazas de concentraciones. El consumo "aceptable" es de 5 mcg/kg por día.

Tanto la monensina como la narasina causan toxicidad en perros y caballos y, en niveles muy bajos, pueden provocar parálisis de las patas traseras. También pueden causar degeneración aguda de rabdomiocitos cardíacos y necrosis en el ganado vacuno y lechero. La razón por la que se utilizan en el ganado es porque fomentan el aumento de peso. La organización MAA comentó sobre estos hallazgos:4

"Moms Across America está muy preocupada por nuestra población, sobre todo por los niños, que sin saberlo comen carne de res con ionóforos antibióticos no recetados, incluso en niveles bajos, sobre todo por el daño potencial al microbioma y al riesgo de crecimiento de bacterias resistentes a los antibióticos.
Nos preguntamos si los efectos secundarios de estos ionóforos en perros y caballos, que causan parálisis, podrían estar relacionados con la cantidad de personas que padecen síndrome de piernas inquietas y neuropatía, que son problemas de salud que acaban de aparecer hace una o dos generaciones... Hasta que se demuestre que son seguros, le solicitamos a nuestras agencias reguladoras, como el Usda y la FDA, no permitir el uso de estos medicamentos en nuestro ganado".

De las 21 muestras de comida rápida que fueron analizadas en cuanto a su contenido de minerales esenciales, ninguna cumplió con los requerimientos diarios recomendados de calcio, potasio, manganeso, cobre, zinc y hierro, mientras que ninguna de las 10 muestras de comida analizada tuvo niveles detectables de vitaminas B9 o B12. Los niveles de vitamina B3 (niacina) también fueron muy bajos.
Autor: Joseph Mercola
Publicado en: https://www.tomecontroldesusalud.com/2023-11-04-l-antibioticos-hormonas-comida-rapida/?ref=tome-control-de-su-salud-newsletter

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