Las orquestas, bandas y coros infantojuveniles entrerrianas reciben a chicos de 9 a 21 años en forma gratuita todo el año. En sus sedes, aprenden a ejecutar instrumentos y ensayan sus reportorios. Una vez al año “Todos juntos actuamos un día para el público”, dijo Horacio Lapunzina, músico y director del agrupamiento Mitai Koi, a AIM, mientras se preparan para confluir en el encuentro interprovincial, en el Centro Provincial de Convenciones, el 1º de octubre.

El programa de Orquestas, Bandas y Coros Infantojuveniles entrerriano, propicia el vínculo cultural y educativo con la comunidad mediante la formación de agrupamientos musicales que, a través de la enseñanza de la música, favorecen la inclusión y la igualdad de miles de chicos que de ellas participan en todo Entre Ríos.

Entre estas orquestas, en la capital provincial, tiene sede en la escuela primaria Nº 185 “Coronel Álvarez Condarco”, en calle Tomás Guido 2.351, y su director, Horacio Lapunzina, compartió con esta Agencia, su mirada sobre la música, el repertorio que interpretan y las presentaciones artísticas que realizan: “La música es una. Nosotros pensamos que la posibilidad de degustar, probar, conocer músicas no tiene fronteras, podemos encarar distintos repertorios y hacerlos nuestros con respeto y entusiasmo”. Explicó que los chicos “en general no tienen los prejuicios que tenemos los adultos, no están formateados”, además, “inmediatamente cuando disfrutan del hecho musical colectivo, cuando les acercamos nuestro entusiasmo como docentes y músicos de lo que hacemos, se abren, no hay una resistencia a eso; al contrario, lo toman con total naturalidad”.

En relación al repertorio que interpretan, indicó: “Nos enfocamos en músicas universales, tomamos músicas populares de distintos lugares y las arreglamos para la agrupación que tenemos; hay desde folklóricas argentinas, latinoamericanas, hasta un tema de The Beatles”.

En este sentido, reflexionó: “Yo sé que el tema popular o universal se presta a muchos equívocos, porque la gente piensa que la música clásica o académica siempre fue considerada como superior y tiene un cierto halo de elitismo, siendo que la mayoría de los compositores sacaron sus temas y desarrollaron su trabajo embebidos en las músicas populares de sus países. Eran músicos populares que llevaron a un plano de mayor desarrollo una música popular y la convirtieron en otra cosa. Nosotros hacemos un poco eso”, explicó. Así, cuando “alguno de los chicos viene con una canción y dice `¿la podemos sacar?´, tenemos que ver si resulta funcional, orgánica a la orquesta, si se puede trabajar; o podemos trabajarla de manera interna, hacer juegos, trabajar para enseñanza, como forma pedagógica, y después ver si queda en el repertorio o no”.

Narró Lapunzina a modo de ejemplo que: “A una alumna mía le encanta Michael Jackson y me pide que le enseñe algunas canciones y lo hago con muchísimo gusto; de ahí a que se pueda después hacer un arreglo general, ya hay otro paso. Hay ciertas músicas que son muy difíciles de tocar, entonces no podrían hacerse con una agrupación tan chica de flauta, percusión y teclado, se necesitarían otros instrumentos”.

En el caso particular de la agrupación Mitai Koi y sus presentaciones, relató: “A veces participamos de algunas cuestiones de la misma escuela, porque nos interesa por la comunidad misma y porque es un modo de devolverle la gran oportunidad de trabajar allí adentro, estar contenidos en una institución, y nosotros en ese sentido tenemos un gran agradecimiento a las autoridades de la escuela Álvarez Condarco porque nos tratan como si fuéramos propios. Cada vez que tenemos la oportunidad de regalarles un rato de música lo hacemos en algún acto escolar; en la despedida de año solemos cerrar con alguno de nuestros conciertos. Vamos a donde nos invitan”, enfatizó. “Lo que nos suele suceder es que las agrupaciones son invitadas a distintos eventos institucionales o escolares. Hubo hace poco una capacitación en el área del Copnaf en el CPC, fue muy grande, y allí nosotros estuvimos tocando porque fuimos invitados”.

Explicó asimismo en relación al programa provincial que: “Generalmente las invitaciones llegan a la coordinación y esta decide o pregunta a las agrupaciones quién está en condiciones de ir, por el horario, por la organización, por distintos motivos, y allí vamos”.

Una vez al año, desde todos los rincones de Entre Ríos, las orquestas, bandas y coros infantojuveniles que integran el programa, confluyen en un encuentro interprovincial. “Todos juntos actuamos un día para el público y para los padres y madres de los integrantes de las agrupaciones. El 1º de octubre se realizará en el CPC, lo cual es interesante porque es un lugar mucho más grande, entonces puede asistir todo el público que quiera, porque La Vieja Usina nos quedó media chica el año pasado cuando hicimos el encuentro”, comentó Lapunzina.

Los niños y jóvenes de 9 a 21 años interesados en participar de este programa provincial, pueden escribir al correo electrónico: [email protected], las inscripciones son gratuitas y están abiertas todo el año.