En el marco del segundo y último debate presidencial, Mauricio Macri anunció que los créditos UVA se van a ajustar por salario y no por inflación a partir del 1 de enero del año próximo.
“Quiero hablarle a las familias que tienen un crédito UVA y están preocupadas por la cuota: a partir del 1 de enero sus créditos se van a ajustar por salario y no por inflación”, lanzó Macri, mientras que afirmó que ese sistema de financiación “fue una gran posibilidad para que más de 100 mil familias accedan a la vivienda propia en un país que había heredado el crédito hipotecario destruido por parte del gobierno kirchnerista”.
En este sentido, refiriéndose a desarrollo social, ambiente y vivienda, último tópico de la noche, el presidente analizó: “Necesitamos realmente desarrollar el mercado de crédito hipotecario porque son muchas familias, cientos de miles de familias, las que necesitan acceder a la vivienda propia”.
La propuesta del mandatario fue recibida con reacciones disimiles por el resto de los candidatos. Nicolás Del Caño, del Frente de Izquierda Unidad, dijo que los créditos UVA “fueron una estafa”, y acusó a Macri de haber “estafado a los hipotecados”.
Alberto Fernández, en tanto, analizó: “Parece que Macri se acordó del problema de la vivienda en estos últimos cinco minutos, porque la verdad es que el presupuesto de la vivienda desde el 2015 hasta hoy se redujo sensiblemente”.
Fernández destacó que los créditos Procrear se redujeron un 81por ciento y el presupuesto en vivienda un 79 por ciento. “Esos créditos UVA iban a ser una solución y hoy son un drama para miles de familias”, concluyó el candidato del Frente de Todos.
A su turno, Roberto Lavagna afirmó ponerse “muy contento” por el anuncio de Macri, que llegó “después de muchos meses de un cierto drama para la gente”, y pidió recobrar el Fonavi para “titularizar a quienes reciben la vivienda”.