Walmart le puso fecha a su retirada de la Argentina. Antes de fin de año, la cadena de supermercados tratará de cerrar la venta de su operación local (92 sucursales, 3 centros de producción y 8.500 empleados) a uno de los 3 grupos empresarios interesados. La búsqueda de un comprador, interrumpida durante la cuarentena, se aceleró este fin de semana con la selección de los candidatos: Francisco De Narváez, Inverlat -la dueña de Havanna- y un consorcio en el que destacan el empresario logístico Oscar Andreani y el fondo Carval.
Las tratativas están a cargo del Citibank y se mantienen en absoluta reserva. Pero trascendió que ya comenzó el proceso de due dilligence, una auditoría clave en el que se evalúan todos los números de la compañía: facturación, rentabilidad, costos y márgenes. Con los resultados a la vista, los candidatos posteriormente pondrán sus ofertas sobre la mesa para que Walmart defina. "La venta contempla el traspaso del 80 al 100% de los activos", señaló una fuente al tanto de la negociación.
La partida de Walmart se produce en un momento difícil para el supermercadismo. En facturación, es la 4° cadena del país detrás de Carrefour, Cencosud (Jumbo, Disco y Vea) y Coto. El dato es relevante para la tasación, pero no es el único. Del total de los puntos de venta y producción, la cadena tiene 68 edificios de su propiedad. El resto son alquilados. Lo que está fuera de discusión es el traspaso de la marca Walmart, que será retirada del mercado argentino en un plazo a convenir con el comprador. No así Changomas ni Punto Mayorista, que formarán parte del paquete.
La empresa norteamericana lleva 25 años en el país. Su salida se produce en el marco de una reestructuración global del negocio y el cierre de algunos mercados, entre ellos Inglaterra y Brasil. La casa matriz tiene hoy como objetivo primordial fortalecer su presencia en los Estados Unidos, donde afronta el desafío de nuevos competidores, como Amazon. La propuesta de venta comenzó a circular en febrero y fue ofrecida a varios empresarios, entre ellos Coto y Eduardo Eurnekian. "Al inicio había más de 10 interesados y a pesar de la pandemia y la crisis, muy pocos se bajaron", señalan.
Más allá de la cifra y la modalidad, en última instancia la operación debe ser aprobada por Defensa de la Competencia. Un aspecto clave es la procedencia del inversor. En tal sentido, ninguno de los 3 candidatos tiene cadena en el país, lo que facilita el trámite. Pero todos tienen larga trayectoria en el rubro.
Por ejemplo, la familia de De Narváez fue dueña de Casa Tía durante muchos años. Con Francisco al timón, ingresaron al supermercadismo hasta su venta, en 1999. De Narváez no se alejó del negocio: hoy tiene supermercados en Ecuador y Uruguay, que operan con la marca Ta-Ta.
Según publica el diario Clarín, en la pulseada también está el fondo Inverlat, que controla Havanna y Fenoglio. Integrado entre otros por 3 ex Citibank, Guillermo Stanley, Damián Pozzoli y Carlos Giovanelli, la firma trata de ingresar al mundo retail. Primero probó suerte con Garbarino, sin suerte, y ahora está detrás de Sodimac, la marca especializada en mejoras hogareñas de Falabella, que también está a la venta. Los entendidos remarcan que los activos en la Argentina están muy bajos y que la crisis ofrece oportunidades. Sin ir más lejos, hace dos semanas el fabricante de celulares Brightstar vendió sus dos plantas de Tierra del Fuego por US$ 1.
El tercer interesado por Walmart es un consorcio de inversores y empresarios creado precisamente para ese fin y que está integrado por Carval, Andreani, dos hermanos (Fabián y Gustavo Papini) y Diego Solá Prats. Los últimos tres tienen probados pergaminos en el supermercadismo. Gustavo Papini fue CEO de Disco y Fabián fue accionista, presidente y director general del grupo de Narváez. En tanto Solá Prats fue gerente general de Jumbo en la Argentina. Los nexos se cruzan: porque De Narváez tiene hoy varios ex Walmart en sus supermercados de Ecuador y Uruguay.
Aunque resta definir el monto, en el mercado creen que la cifra estará muy por debajo de otras operaciones similares. "Casa Tía se vendió por US$ 630 millones y Disco, en más de US$ 300 millones. Walmart está muy por debajo de eso", opinó un operador.
Fuente: Clarín