El mercado laboral continúa por ser una de las áreas más profunda y transversalmente atravesadas por la brecha de género, que en 2023 provocó que seis de cada diez pesos entregados como remuneración fueran a parar a manos de hombres, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) este miércoles.
Para peor, otros datos precisan el grave tenor del impacto provocado por el sexismo y el machismo en el sector: a nivel anual, las mujeres consiguieron un 13 por ciento menos de trabajo y ganaron un 19 por ciento menos por hora en promedio.
Las estadísticas fueron dadas a conocer esta tarde en la actualización del informe de generación del ingreso por sexo y edad, que ilustra las diferencias entre hombres y mujeres en el mercado laboral en el último año. El período estuvo marcado por una evidente prevalencia del género masculino sobre el femenino, delineada principalmente en la distribución de los puestos de trabajo con un 56,3 por ciento para los varones y un 43,7 por ciento para las mujeres. La mayor paridad se alcanzó en el sector de Asalariados no registrados (52 por ciento a 48 por ciento), mientras que el de No asalariados reportó una gigantesca diferencia de 64,5 por ciento a 35,5 por ciento.
Sumado a ello, uno de los puntos que más atención generó es el del análisis de la brecha de género de remuneración por hora trabajada, que arrojó que en promedio los hombres ganan un 6,4 por ciento más que las mujeres en la totalidad de los rubros laborales registrados. El dato disminuye levemente a un 4,1 por ciento en el sector público, pero luego se dispara en el sector privado hasta reportar un inmenso 18,9 por ciento que demuestra a las claras los desafíos que el género femenino debe soportar todavía para conseguir salarios que siquiera se acerquen a los de sus colegas varones.
Otro tanto se debe indicar respecto al total de la remuneración al trabajo asalariado: en 2023, el 61 por ciento del dinero entregado en el mundo laboral fue cobrado por hombres, mientras que las mujeres solo percibieron el 39 por ciento restante. La estadística se traduce en que aproximadamente 6 de cada 10 pesos fueron a parar a manos masculinas el año pasado. El dato es peor en el mercado informal, donde la diferencia asciende a un 66 por ciento ante un 34 por ciento respectivamente (6,6 pesos cada 10). Lo propio ocurre al indagar en la remuneración por puesto de trabajo, que beneficia al género masculino por sobre el femenino en todas las franjas etarias.
Finalmente, el relevamiento del Indec arrojó un alarmante detalle referido a los rubros en los que suelen trabajar hombres y mujeres. Los varones prevalecen en casi todas las áreas y su participación supera el 80 por ciento en Agricultura y pesca, Minería, Transporte y comunicaciones, Servicios (electricidad, gas y agua), y, principalmente, Construcción, donde su dominación es casi total. En cambio, las mujeres suelen ser restringidas a sectores ligados a las tareas del hogar o, en todo caso, trabajos “blandos”, como lo son la Administración, la Enseñanza, la Salud y, en especial, el trabajo en casas privadas con servicio doméstico.