El Banco Central aumentó los requisitos para operar en el mercado cambiario y defender las reservas. Después del control de capitales o cepo, ahora trabó las operaciones de contado con liquidación y las de dólar MEP.
En otras palabras, frenó el llamado “rulo VIP” que hacían las grandes manos alargando los plazos en que deben tener los bonos en dólares que compran y en impedir la transferencia de dólares al exterior entre cuentas que no sean propias. De esta manera, corta el revolving que se hacía con estos giros de dinero donde la ganancia se reinvertía en nuevas operaciones.
“Lo que consiguieron con esto -aseguró un operador- es quitarle oferta al ‘contado con liqui’ y, por supuesto lo van a encarecer. Y yo creo que acá no terminan las medidas. Que no le extrañe que en pocos días le reduzcan el cupo de compra de diez mil dólares mensuales”.
Ya cuando publicó la lista de quienes compraron dólares por encima del cupo, el Banco Central mostró que está contando hasta los centavos que hay en las reservas porque están muy ajustados ya que no ingresaron los 5.400 millones de dólares que esperaban del FMI.
Como la circular no se conoció hasta después del cierre de los mercados, no se sintió el impacto. De todas maneras, el Banco Central intervino para que no se dispare el dólar. El dólar mayorista terminó con un alza de 26 centavos a 57,59 pesos, pero con un elevado monto de negocios de 576 millones de dólares debido a los vencimientos de los fines de mes.
En bancos y casas de cambio, el dólar con la ayuda de los bancos oficiales, subió 22 centavos a 59,82 pesos. De no haber intervenido la oferta oficial su precio hubiera sido más elevado.
El “libre” siguió estático en 61,75 pesos, mientras el contado con liquidación bajó a 63,05 pesos y el dólar MEP o bolsa, a 61,22. Estos valores se aplanaron porque hubo ingresos del exterior de dólares por parte de las empresas para pagar los sueldos y otros gastos.
El movimiento influyó levemente en la baja del riesgo país que terminó en 2130 puntos básicos. La estabilidad del Bono del Tesoro norteamericano ayudó a que el riesgo baje 27 puntos básicos.
El Bonar 2024, el título de referencia de la deuda, quedó sin cambios, mientras que el Bonar 2020 aumentó 2,56 por ciento. La Leve suba de los distintos Discount en dólares de entre 0,30 y 0,67 por ciento contribuyó a esta mejora del riesgo que es irrelevante.
Las reservas fueron castigadas. Se perdieron 236 millones a 48.702 millones a pesar de que el oro subió 0,40 por ciento y el euro también tuvo un día favorable frente al dólar. Pero hubo un pago de YPF al exterior que hizo bajar los encajes de uno de los bancos oficiales en el Banco Central.
Lo que extraña es que, a pesar de que el Banco Central impide el acceso a los inversores institucionales al mercado de cambios, siga perdiendo reservas diariamente y que tenga que endurecer las medidas de control para evitar que se le vayan las divisas.
Desde el martes empieza una nueva historia en los mercados. Se anticipan más regulaciones y encarecimientos de los dólares que se utilizan para sacar capitales.