Ante el Parlamento, el líder norcoreano Kim Jong Un anunció una ley que refuerza el desarrollo nuclear del país
Corea del Norte aprobó una ley que autoriza el lanzamiento de misiles nucleares preventivos “automáticamente” y declara “irreversible” su programa de armamento atómico, así lo indicaron medios estatales hoy por la madrugada. La noticia surge en medio de tensiones fuertes en la península coreana, donde Pyongyang ha realizado una serie inédita de pruebas armamentísticas durante el año.
Kim Jong Un hizo comentarios el jueves durante un discurso ante el Parlamento en donde mencionó dicha ley, misma que fue aprobada por el resto de los integrantes.
El texto precisa que de ser víctima de una fuerza extranjera, Corea del Norte podría lanzar un ataque nuclear preventivo “automáticamente” y “destruir a las fuerzas hostiles”. Así lo indicó la agencia oficial de prensa KCNA. Con la nueva ley, "el estatus de nuestro país como Estado armado nuclearmente se convierte en irreversible", dijo el líder Kim Jong Un, según KCNA. Esa decisión tiene “el propósito de enfatizar a la comunidad internacional que la propia Corea del Norte es un Estado de armas nucleares”, agregó
Pyongyang asegura en el comunicado que Corea del Sur -con Estados Unidos atrás- busca desarmar a Norcorea para así, poder acabar con el actual gobierno. Por lo que advirtió que en tal caso “ejercerá su derecho a la autodefensa”. “Dependemos de la seguridad futura del país y del pueblo. Nunca debemos renunciar a nuestras armas nucleares”, agregó el gobierno en el comunicado.
Corea del Norte ha desplegado una serie récord de ensayos militares desde enero, incluyendo el primer misil balístico intercontinental a pleno alcance desde 2017.
Estados Unidos y Corea del Sur han advertido repetidamente que Pyongyang está preparando el que sería su séptimo ensayo nuclear.
Funcionarios de Estados Unidos y Corea del Sur afirman que Kim podría no tardar en dar el siguiente paso y ordenar el primer ensayo nuclear del país en cinco años, como medida de presión para obligar a Washington a aceptar la idea de Corea del Norte como una potencia nuclear y negociar concesiones desde una posición de poder.
El nuevo gobierno de Corea del Sur propuso el jueves una reunión con el del Norte para abordar la reanudación de los encuentros entre familias separadas por la Guerra de Corea (1950-1953), a pesar de la tensa relación que mantienen las dos naciones rivales por el programa nuclear de Pyongyang.
Las reuniones familiares son un asunto humanitario y muy emotivo porque en ellas participan personas de más de 80 años que están desesperadas por reunirse con familiares perdidos años de morir. Pero es probable que Corea del Norte, que suele emplearlas como moneda de cambio en acuerdos con el Sur, no acepte la oferta por su constante rechazo a las ofertas de Seúl y Washington para retomar las negociaciones sobre su programa nuclear y otros asuntos, mientras se centra en perfeccionar su tecnología armamentística.