Cada 22 de noviembre se celebrar el Día Internacional de la Música, una jornada dedicada a honrar el poder de ese arte para unir a las personas más allá de las fronteras y las diferencias culturales.
En esta fecha se conmemora la muerte de Santa Cecilia, patrona de los músicos y mártir cristiana. En sus retratos que datan del siglo XV, se la ve tocando el arpa u otros instrumentos.
El día especial fue proclamado por la Unesco en 1982, busca destacar la importancia de la música como forma de expresión artística, así como su papel fundamental en la promoción del entendimiento y la tolerancia entre las diversas comunidades alrededor del globo.
Se celebró por primera vez en Edimburgo en 1695 y luego se fue extendiendo a otros países europeos como Alemania, España y Francia. Llegó a América Latina entre 1919 y 1920, cuando Brasil adoptó el festejo.
Quién fue Santa Cecilia, la patrona de la música
En el siglo II después de Cristo, el Imperio Romano no aceptaba la religión católica pero Cecilia la practicaba. Sus padres la obligaron a casarse con Valeriano, un hombre de la misma sociedad patricia que fue bautizado y adoptó la fe de su esposa.
Valeriano y su hermano Tiburcio comenzaron a sepultar cadáveres cristianos, una tarea prohibida por entonces. Fueron arrestados y luego, ante la negativa a renunciar a su fe, torturados y condenados a muerte. Cecilia también rechazó la orden de renunciar a su fe y fue trasladada a un “horno caliente” para que cediera en su postura religiosa pero no lograron doblegar a la muchacha y fue condenada a muerte.