"Rechazamos la aplicación de sanciones y cualquier otra medida que pueda exacerbar un conflicto, generando tensiones que justifiquen una mayor intervención externa", sostuvo el embajador argentino ante la OEA, Carlos Raimundi.
La Argentina, representada por el embajador Carlos Raimundi, se abstuvo de condenar las violaciones a los Derechos Humanos (DDHH) en Nicaragua ante la Organización de los Estados Americanos (OEA).
"Argentina rechaza la aplicación de sanciones y cualquier otra medida que pueda exacerbar un conflicto, generando tensiones utilizadas para justificar una mayor intervención externa", dijo Raimundi para justificar su decisión.
A pesar de esta postura, el organismo regional aprobó este miércoles una resolución que afirma que Nicaragua "no está cumpliendo con los compromisos" de la Carta Democrática Interamericana.
La iniciativa insta al gobierno de Nicaragua a que "con carácter de urgencia y como primera medida" ponga en libertad a "todos los presos políticos y acepte una misión de buenos oficios de alto nivel", que debe ser autorizada por el Consejo Permanente.
Además, resuelve "la realización de reformas electorales integrales, de acuerdo con lo solicitado en resoluciones de la Organización de los Estados Americanos y de conformidad con las obligaciones de Nicaragua en materia de DDHH".
Finalmente, realiza un "llamamiento al Gobierno de Nicaragua para que permita el retorno inmediato de los órganos internacionales de derechos humanos, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Oficina de Alto Comisionado de la ONU".
La resolución fue apoyada por 25 de los 34 miembros del bloque regional, con el único voto contrario de Nicaragua. Ocho países no votaron: Argentina, Belice, Bolivia, Honduras, México, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas y Santa Lucía.
En tanto, Ortega denunció "otro evento intervencionista de la Organización de los Estados Americanos", a la que acusó de sumisión al "imperialismo norteamericano". "Este es otro diabólico juego de esta organización súbdita y satélite de los Estados Unidos", afirmó.