Cada 14 de julio se celebra el día internacional de la visibilidad no binaria, lo que supone una lucha por el reconocimiento de esta identidad. Esta fecha se conmemora en representación de las personas que no se identifican total o parcialmente con los géneros femenino o masculino asignados al nacer. En Argentina, rige tanto la Ley de Identidad de Género como el DNI no binario, pero ¿qué pasa con los derechos de las diversidades en la era Milei?
Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), las personas no binarias son aquellas que no se identifican total o parcialmente como mujeres o hombres; es decir, que trascienden o no están incluidas dentro del binario mujer-hombre.
Las identidades no binarias reúnen, entre otras categorías identitarias, a personas que se identifican con una única posición fija de género distinta de mujer u hombre, personas que se identifican parcialmente como tales, personas que fluyen entre los géneros por períodos de tiempo, personas que no se identifican con ningún género y personas que disienten de la idea misma del género,
La mayoría de los países del mundo no reconocen el género no binario como legal, lo que significa que la mayoría de las personas no binarias todavía no tienen un pasaporte de género e identificación oficial.
En Argentina, desde 2012, rige la Ley de Identidad de Género que reconoce que todas las personas tienen derecho a un trato digno y acorde a su identidad, entendiéndose por ésta “la vivencia interna e individual del género tal como cada persona la siente” (art. 2) e indica que toda persona tiene derecho a “ser tratada de acuerdo con su identidad de género”, y en particular, “a ser identificada de ese modo en los instrumentos que acreditan su identidad respecto de el/los nombre/s de pila, imagen y sexo con los que allí es registrada” (art. 1).
En tanto, el entonces Gobierno nacional lanzó el DNI no binario en julio de 2021. De esta manera, se amplió el abanico de identidades de género reconocidas por el Estado nacional, que hasta ahora solo se habían limitado a mujer o varón. Argentina es el único país de América Latina y Central en reconocer este derecho.
En menos de un año —el relevamiento es hasta abril de 2022— 354 personas rectificaron su documento con dicha identidad, lo que representa el 2,87 por ciento del total de rectificaciones realizadas en los últimos 10 años, y el 10,8 por ciento de las del último año (sobre un total de 3272).
Según el Decreto 476/2021 de DNI no binario, quienes optan por esta alternativa exhiben en el campo “sexo” una X.
Qué pasa con los derechos en la era Milei
Argentina muestra señales de retroceso en derechos en derechos humanos bajo la gestión del presidente Javier Milei que ha criticado los movimientos como "ideología de género", los despidos de personas transgéneros que llegaron al gobierno bajo una ley de cupo laboral han saltado las alarmas.
Argentina, un país referente en América Latina en derechos sexuales y reproductivos en la última década, se encuentra en alerta ante un presidente que rechaza las políticas de igualdad y no discriminación.
El primer embate contra la identidad no binaria y todas las diversidades fue la eliminación de la institucionalidad de género, con la desaparición del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad. Con esta decisión, se pasaron por encima políticas públicas que asistían a la comunidad, constató AIM.
Otra derrotas ha sido para la ley de cupo laboral trans de 2021 que obligaba al Estado a contratar en el sector público a no menos del uno por ciento de personas travestis, transexuales y no binarias para fomentar su inclusión.
Además, la presentación del DNI no binario en julio del 2021 ahora resultará un dolor de cabeza para quienes quieran viajar con una X en su pasaporte.
Así lo hizo saber Cancillería Argentina, a cargo de Diana Mondino, al publicar los requisitos que los argentinos deben cumplir para salir del país. En uno de ellos se lee: "Existe la posibilidad de que las personas que posean documentación donde indiquen una X vean restringido su ingreso, permanencia o situación de tránsito. Tomá precauciones y adoptá prácticas de autocuidado según el país y/o región de destino”.
Por otro lado, el Gobierno de Javier Milei prohibió el lenguaje inclusivo y “todo lo referente a la perspectiva de género” en la Administración pública argentina, según anunció este martes el portavoz presidencial, Manuel Adorni.
“No se va a poder utilizar la letra -e, la arroba, la -x y [se va a]evitar la innecesaria inclusión del femenino en todos los documentos”, detalló el funcionario. Después agregó: “Las perspectivas de género se han usado también como negocio de la política”. La decisión está en línea con el rechazo del presidente ultraderechista a políticas de igualdad que él considera parte del “adoctrinamiento” del “marxismo cultural” y que pretende batallar.