Los investigadores han creado un modelo capaz de simular la compleja historia de la vida en América del Sur para comprender mejor los complejos que factores afectan a la aparición, distribución y extinción de las especies.
El modelo, que incorpora procesos ecológicos y evolutivos clave, produjo resultados que coinciden estrechamente con los patrones geográficos de biodiversidad para aves, mamíferos y plantas que se observan en la actualidad, según informa un nuevo estudio.
Si bien los procesos individuales responsables de la aparición y distribución de las especies sí son comprendidos de forma general, el modo en el que cada uno interactúa junto a otros a lo largo de amplias franjas de espacio y tiempo es complejo.
Los autores sugieren que el uso de modelos espacialmente explícitos y dinámicos que incorporan una variedad de procesos físicos y biológicos ampliamente comprendidos tiene un gran potencial para revelar sus evasivas interacciones subyacentes.
En esta ocasión, Thiago Rangel et al. presentan uno de esos modelos que combina dinámica del clima, adaptación evolutiva, cambios de rango, fragmentación, especiación, competencia y extinción. Simularon con él el flujo y reflujo de la biodiversidad en América del Sur durante los últimos 800 000 años, un período caracterizado por la repetición de ciclos glaciales e interglaciares.
A diferencia de otros modelos, las simulaciones de Rangel et al. se basan en el realismo de los procesos ecológicos y evolutivos modelados, que incorporan el modelado de la topografía y el paleoclima continentales, a fin producir patrones cambiantes espaciales y temporales de especiación, persistencia y extinción (o "cunas", "museos" y "tumbas").
Sus simulaciones han dado lugar a patrones realistas que presentan un sorprendente parecido con la biodiversidad contemporánea tanto a escala continental como regional. Según los autores, los resultados sugieren el papel crítico de la topografía y el clima como motores de la diversificación y la extinción de especies.
Fuente: Aaas