Se trata de un evento tradicional que recorre siete kilómetros mientras suenan los parches del instrumento. Este año, la temática es el homenaje a precursores y creadores de la danza. Más de 20 mil personas, entre santiagueños y turistas, participaron este sábado a la mañana de la XXI Marcha de los Bombos y IX de La Marcha de las Cuerdas y Fuelles Santiagueños que se realizó en el marco de los festejos por el 470° aniversario la “Madre de Ciudades”.

Durante la marcha se recorren siete kilómetros que parten desde distintos puntos de la capital: norte, sur este y oeste, durante los cuales turistas y santiagueños hacen latir el parche de sus bombos. A lo largo del recorrido también hay homenajes especiales y se hacen presentes la danza y los zapateos. Una fiesta y celebración de las tradiciones bien santiagueñas.

Todos los años, la marcha tiene una temática. Este año se homenajeará a José Gómez Basualdo y Andrés Avelino Chazarreta, precursores y creadores de la danza. Los homenajes se realizarán en el parque Aguirre, donde confluyen todas las columnas.

En la 21° edición, la columna norte partió desde el patio de la casa del "Indio" Froilán, uno de los creadores de este ya tradicional evento. "Nació la idea cuando Santiago cumplía 450 años allá por el 2003. Pedían proyectos que tuvieran que ver con la cultura de Santiago y pensamos en una marcha de bombos. Fue una noche del mes de febrero, y como se iba a celebrar todo el año, había tiempo para todo. Pero nos basamos en la fundación, que fue el 25 de julio. Se empezó a gestar y en hora y media teníamos el proyecto", explicó Froilán.

Respecto del bombo, enfatizó que es "el alma mater de la marcha": la chacarera no se puede hacer sin bombo. Es un elemento que nació como medio de comunicación y hoy es un medio que incorpora la música, sobre todo a la chacarera", finalizó.

En un escenario montado al frente de la Feria Artesanal, intérpretes de la música popular animaron el cierre de esta tradicional expresión cultural que con el correr de los años se consolidó como una de las actividades festivas más esperadas de cada cumpleaños de la ciudad de Santiago del Estero.