El pasado viernes comenzó el infierno en el norte de la provincia de Córdoba. Un rayo provocó un incendio forestal entre las localidades de Caminiaga y Chuña Huasi. Desde entonces, la situación se volvió incontrolable y hace seis días el fuego está haciendo estragos, afectando principalmente a los departamentos de Tulumba, Sobremonte y Río Seco.
Las fuertes ráfagas de viento del sector sur avivaron las llamas este miércoles, causando varios frentes activos. El Perchel, camino al Cerro Colorado, fue escenario de un verdadero drama y los parajes de la zona están sin energía eléctrica debido a la caída de postes. Además, el fuego destruyó alambrados y los animales que sobrevivieron están a la deriva, perdidos, sin alimentos ni agua.
En Simbolar el panorama también fue desolador. Pasadas las 14:00, se desató otro foco tras la caída de un poste de luz. Se levantó una inmensa columna de humo y el fuego avanzó a toda velocidad quemando todo lo que tenía a su paso. Varias viviendas se vieron comprometidas.
Las víctimas de la catástrofe
Los incendios en el norte cordobés dejaron como saldo tres personas fallecidas. Este miércoles murió Didier Jesús Cáceres, el joven de 27 años que tenía el 62 por ciento de su cuerpo quemado. Su hermano, Namir, de apenas 21 años, murió incinerado el sábado. Viajaban en auto por la Ruta Nacional 9 cuando el fuego los encerró y no tuvieron escapatoria.
Miguel Armas (48) es otra de las víctimas fatales. Fue encontrado sin vida el domingo cerca de Sebastián Elcano. Huía del avance de las llamas en medio del campo.
Además, centenares de animales murieron alcanzados por el fuego y otros sobrevivieron, pero resultaron con graves heridas por las quemaduras. Por otro lado, desde la Unidad de Emergencias y Alertas Tempranas de la CONAE, se quemaron 30.600 hectáreas en cercanías a la localidad de San Pedro Norte.
El pronóstico no ayuda
Las condiciones meteorológicas adversas complican aún más la situación. Las altas temperaturas, la sequía, los fuertes vientos y la ausencia de lluvias hacen que los incendios se vuelvan incontrolables.
Bomberos Voluntarios y aviones hidrantes trabajan sin descanso. Vecinos de la zona colaboran, con el objetivo de salvar lo poco que les queda, pero la tarea se dificulta. El fuego arrasa con todo a su paso, debido a que hay mucho material combustible.
El panorama es desolador y seguirá siendo crítico. Se espera para este jueves viento del sector este y sudeste con ráfagas de entre 20 y 30 km/h, lo que aportará humedad de a poco.
¿Cuándo podrían llover? Este fin de semana aumentará la nubosidad junto con la humedad y con probabilidad de precipitaciones débiles. El alivio llegará recién la próxima semana, entre el martes y miércoles.