El Registro Judicial de Causas y Antecedentes de Violencia (Rejucav) indica que en Entre Ríos desde 2016 y hasta octubre de 2023, hubo un total de 115.203 denuncias y redenuncias de violencia familiar y contra la mujer. Desde enero de 2016 a diciembre de 2022, el sistema de Justicia en Entre Ríos recibió a 78.458 mujeres víctimas de violencia de género. Esta cifra indica que 32 mujeres víctimas de violencia de género, promedio por día, accedieron al servicio de Justicia.

Desde el Superior Tribunal de Justicia recordaron que la violencia contra las mujeres es una grave vulneración a sus derechos fundamentales y afecta su integridad física, psíquica y sus relaciones interpersonales, en los diferentes ámbitos de la vida. A su vez, constituye un problema complejo y multicausal, que se manifiesta de diversas formas: física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, simbólica y política; y pueden manifestarse en distintos ámbitos.

Los tipos de violencia que sufren las mujeres están relacionados y pueden suscitarse de manera simultánea, impactando negativamente sobre su salud, pudiendo provocar riesgo de vida y hasta las muertes de quienes la vivencian, precisaron en un informe difundido con motivo de conmemorarse este sábado el 25N, Día Internacional de la Lucha contra la Violencia hacia la Mujer.

El trabajo elaborado por la Oficina de Violencia de Género del STJ indica que, en este año, 1 de cada 65 mujeres habitantes de Entre Ríos denunció encontrarse en situación de violencia.

Además, el tipo de violencia con más denuncias es la psicológica (60 por ciento), seguida de la física (34 por ciento) y en menor medida la simbólica (6 por ciento).

“Las estadísticas nos señalan el aumento de la violencia que se traduce en mujeres violadas, quemadas, fracturadas, estranguladas, varias de ellas embarazadas, discapacitadas, niñas y ancianas. Esto nos interpela como sociedad y requiere de acciones y esfuerzos conjuntos”, destacó la presidenta del Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos, Susana Medina.

La jueza destacó que es necesario tomar conciencia de qué actitudes constituyen violencia; y que desnaturalizar los hechos y conductas violentas, conocer las leyes que las sancionan y utilizar los mecanismos disponibles para la denuncia, sanción y reparación de los hechos violentos, son componentes esenciales de esta tarea.

Asimismo, ratificó que desde el STJ se trabaja fuertemente para sancionar y erradicar la violencia. Indicó que la prevención es tarea de todos los organismos del Estado; pero también de la familia; vecinos; compañeros/as de trabajo y amigos/as que denuncien esta situación.

“La violencia no es una cuestión privada sino de orden público. Prevenirla es una obligación; pero una vez ocurrida, callarse, tolerarla y mirar para otro lado es una forma de encubrirla”, señaló finalmente.