Hasta ayer, el despido sin causa se penaba con dos indemnizaciones; en los próximos seis meses, habrá un descenso escalonado del monto que cobrará un trabajador en caso de ser echado sin justa causa

Por decreto, el Gobierno prorrogó ayer a última hora la doble indemnización, pero la flexibiliza de manera gradual, hasta junio de 2022. La decisión se confirmó mediante el Decreto 886/21 que se publicó en el Boletín Oficial.

De acuerdo con el documento, la nueva norma plantea que, en el caso de despido sin causa, el trabajador afectado “tendrá derecho a percibir, además de la indemnización correspondiente de conformidad con la legislación aplicable, un incremento equivalente al 75 por ciento del monto de la misma, desde el primero de enero y hasta el 28 de febrero de 2022″.

Los despidos sin causa serán compensados con una indemnización extra del 75 por ciento hasta febrero, del 50 por ciento hasta abril y de un 25 por ciento hasta el 30 de junio de 2022.

La normativa aclara que los porcentajes indicados “se calcularán sobre todos los rubros indemnizatorios originados con motivo de la extinción incausada del contrato de trabajo”, pero que el monto correspondiente “no podrá exceder, en ningún caso, la suma de 500.000 pesos”.

Los cambios a la doble indemnización entran en vigencia a partir del 1° de enero de 2022. Es decir, que en lo que queda del año, si hay un despido sin causa corresponde aún la doble indemnización completa.

En su artículo quinto, el decreto también estipula: “El presente decreto no será aplicable a las contrataciones celebradas con posterioridad a la entrada en vigencia del Decreto de Necesidad y Urgencia Nº 34/19 ni al Sector Público Nacional definido en el artículo 8º de la Ley Nº 24.156 y sus modificatorias, con independencia del régimen jurídico al que se encuentre sujeto el personal de los organismos, sociedades, empresas o entidades que lo integran”.

En los fundamentos, el Gobierno sostiene que la medida debe continuar porque los niveles de empleo registrado aún están por debajo de lo informado en diciembre de 2015 y lo mismo sucede con la tasa de desempleo.

De acuerdo al texto, “es necesario mantener el objetivo de acrecentar el nivel de protección de trabajadores y trabajadoras formales mediante un incremento de los resarcimientos originados en los despidos incausados”.

Para el Gobierno, este proyecto es una salida equitativa de la emergencia laboral. Dice en los considerandos: “Que, de este modo, se acompaña la salida de la emergencia pública ocupacional con un criterio de equidad y se permite avanzar en procesos de diálogo social en un marco de una protección más intensa que la que garantiza el ordenamiento vigente en los supuestos indicados”.

El texto fue firmado por el ministro de trabajo, Alberto Fernández, y el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, entre otros.

El Presidente había dicho ante empresarios, en el Coloquio de IDEA, este año, que la medida restrictiva no se sostendría en el tiempo.