Los docentes universitarios de la UBA piden que no se aumenten los aportes personales a las obras sociales que, además, no cuentan con un normal funcionamiento a nuestra obra social, donde los coseguros se incrementan cada vez más, se demoran las autorizaciones y se restringen los servicios de salud, supo AIM. Realizarán una asamblea el próximo martes para definir medidas a seguir.
Se pretende que el aporte mínimo de los trabajadores docentes sea de 700 pesos. Esto implica el 5,6 por ciento del salario mínimo garantizado de 12.500 pesos brutos para una dedicación simple.
Pero como la UBA y el ministerio mantienen el aporte forzoso de la caja complementaria (4,5 por ciento) y el resto de los pagos obligatorios (como baja incidencia y alto costo) esto representa el 10 por ciento del salario de bolsillo de los docentes.
“La ley nos impone solo el tres por ciento sobre el salario bruto y un seis por ciento a la UBA, que no incrementa su aporte, para seguir descargando el ajuste sobre los docentes”, denunciaron desde el sector a AIM.
En lugar de este brutal aumento, la UBA “tiene que exigir el pago de la cláusula gatillo y un básico para el cargo testigo de 40.000 pesos y, entonces, en nada habría que aumentar nuestros aportes, ni cortar servicios, ni cobrar abusivos coseguros”.
“No satisfechos con este ajustazo sobre lxs docentes en actividad, incrementan en un 100 por ciento el aporte de los jubilados (del 4,5 al nueve por ciento de los haberes brutos)”, indicaron.
Justo en el momento en que una comisión creada por la Ley de Solidaridad estudia quitar el 82 por ciento móvil, “la UBA tiene que defender nuestra jubilación y no quitarnos un 4,5 por ciento de la misma”.
“Son los salarios de pobreza, las sumas fijas y en negro, la voracidad de los laboratorios y clínicas los que quiebran la obra social (Dosuba). Nosotros, que la defendemos, exigimos que la UBA y el Gobierno cubran sus gastos, comenzando con un aporte de 300 millones de pesos de emergencia”, advirtieron los docentes.
Finalmente, nos pronunciamos como siempre por la derogación de la ley menemista que rige nuestras obras sociales y permite estos incrementos. Nos pronunciamos por la apertura de todos los ingresos y gastos de Dosuba. Nos pronunciamos para que la obra social sea administrada por sus afiliados elegidos democráticamente”.